Mónica se despertó en la mañana, Laica ya no estaba en la recámara, se levantó al baño, lavó su boca y bajó a la cocina cubierta tan solo por una bata y una panty, al llegar encontró al animal echada frente a la puerta del traspatio…"Buenos días chiquita", le dijo y la perra movió el rabo, Mónica se sirvió un vaso con leche y subió a cambiarse de ropa, se puso unos shorts y una playera, subió su bicicleta a la camioneta y salió a su ejercicio diario, Jesús ya la esperaba en el parque, montaron a las bicicletas y subieron por la montaña, Mónica se detuvo y bajó de la bicicleta diciendo "Espera Jesús, me cansé, no dormí bien anoche", Jesús se detuvo, se acercó a Mónica y con su vista recorrió el cuerpo de ella, sus muslos y sus pantorrillas, sus nalgas, su cintura bien delineada, sus pechos firmes y redondos, la miró a los ojos y le dijo.

-Qué linda eres Mónica, seguro no te dejó dormir algún galán

-Gracias Jesús, tú también eres un chico muy guapo y amable, pero no pude dormir por que estaba muy inquieta, quien sabe porqué…Tal vez me hizo falta el galán para dormir bien

Jesús recargo las bicicletas en un árbol, Mónica se sentó sobre una piedra y Jesús se acercó a ella, no le separaba la vista de las piernas y ella al notar la mirada del chico volteo a ver sus muslos, en un principio pensando que había algo mal en su ropa, pero al observarse entendió que la mirada insistente era hacia sus piernas, se puso de pie y le dijo "Sigamos, ya descansé unos momentos y ahora nos toca ir de bajada". Al acercarse a Jesús él la tomó del brazo la jaló, puso su mano sobre las nalgas de Mónica y la pegó a su cuerpo, Mónica quedó inmóvil sintiendo sobre su pubis la erección de Jesús quien le dijo.

-Te deseo Mónica, me muero de deseos por ti, llevo un mes detrás de ti como animal en celo, quiero besar, lamer, morder toda tu piel, besar tus labios, sorber de tus pechos, lamer y probar lo dulce de tu sexo y penetrar tu hermoso cuerpo, mientras observo tu lindo rostro excitado por el placer, Sé mía Mónica.

-Suéltame Jesús, por favor.

-No Mónica, entiende que ya no lo resisto, necesito tenerte, necesito desnudarte y hacerlo contigo

-Jesús….No puedo Jesús, no puedo hacerlo

-¿No te gusto?

-No, no es eso, eres muy atractivo….___Jesús la interrumpió

-¿Entonces?, no tienes nada que perder.

-No Jesús, no puedo, ¡entiéndeme por favor!

-Mónica…Vamos a un hotel o a donde quieras, solo déjate llevar, seré lo más dulce y cariñoso que pueda y me esforzaré por llenarte de placer…Te lo suplico.

-No Jesús, regresemos

Mónica se separó de él y al darle la espalda él dijo

-¿Es por mi verdad?, no soy suficiente para ti.

Mónica se volteo hacia él, se acercó le tomó la mano y le dijo

-¿Porqué los hombres no pueden entender a las mujeres?... Cuando una mujer quiere acostarse con un hombre lo obliga a pedírselo y acepta hacerlo, cuando no puede hacerlo no importa si el hombre mas guapo del mundo se lo pide…

-Mónica, entiende que te deseo como a nadie en el mundo

-Y tú entiende que no lo puedo hacer… ¿Quieres hacerlo?, ¡aquí estoy!, desnúdame, penétrame y disfrútame como quieras, pero yo no podré responder como mujer, te estarías masturbando dentro de mi, me estarías violando Jesús….El sexo es cosa de dos y su placer radica en la entrega mutua y no en el simple orgasmo.

-Perdón Mónica, es que no sabes como te deseo___Dijo Jesús bajando la cabeza.

-No, no, no digas eso, tú expresaste tu deseo y yo te dije que no puedo cumplírtelo…Dejémoslo así, no hay ofensas, no hay perdones ¿De acuerdo?.

-Diablos Mónica…. ¡Realmente eres increíble!

Subieron a las bicicletas y mientras bajaban de la montaña Jesús se puso a un lado de ella y le preguntó

-¿Y si te casas conmigo?...

Mónica rió y le respondió

-Jesús, no puede ser….No puedo creer que llegarías a casarte conmigo solo para tenerme en la cama.

-Haría lo que fuera necesario

-Ya Jesús, no hablemos más de eso.

Llegando al parque Jesús metió la bicicleta de Mónica en la camioneta y le dijo "Te invito a desayunar, no quiero que haya rencores", ella le sonrió y le dijo "Mejor vamos a mi casa, yo preparo un buen desayuno, yo soy la que debe demostrar que no hay rencores".Llegaron a la casa de Mónica y entraron a la cocina, ella preparó el desayuno y se sentaron a la mesa a comerlo….Cerca del mediodía, Mónica acompañó a Jesús a la puerta de la calle, se despidieron con un beso en la mejilla, Jesús le preguntó, "¿Nos vemos mañana?", ella le respondió "Como todos los días" él dijo "Y me darás un delicioso desayuno como el de hoy?", Mónica rió y respondió "Te lo mereces…así que tendrás también tu desayuno"

Jesús salió y Mónica cerró la puerta, caminó por el jardín, se sentó bajo el sol a esperar que su cabello terminara de secarse, se acercó su perra y ella la acarició, el animal acercó la nariz a los pants que vestía y comenzó a olerlos, Mónica le dijo "¿Que me hueles?, estoy recién bañada, tu eres la que comienzas a oler otra vez a perro, pero no te puedo bañar tan seguido"

Pasaron los días con la misma rutina, Mónica iba a montar en bicicleta con Jesús y por las noches conversaba por internet con Alejandro, una noche no encontró a Alejandro pero había un correo de él, lo abrió y leyó "Muñeca si Mahoma no va a la montaña…El viernes llego por la noche al hotel fiesta americana de León, te suplico que me llames para vernos"…Mónica se puso muy nerviosa, pensó "Es lunes, tal vez se le presente algo y cancele, eso espero, no puedo decirle que no recibí su correo" en eso estaba cuando sonó su celular, pensó que era Gustavo que hacía varios días que no le hablaba, tomo el teléfono y vió que era Eduardo

-Diga

-Mónica, soy Eduardo.

-Pensé que nunca me hablarías, dijiste que antes de lo que me imaginaría… parece que soy de imaginación muy corta.

-No preciosa, es que salí de la ciudad de improviso y estuve fuera estas tres semanas, para pedirte perdón te invito a cenar, ¿Aceptas?

-Si, ¿cuando?

-Hoy, ¿digamos en una hora?

-OK, donde nos vemos

-Paso por ti.

-¿Y a donde piensas pasar por mi?

-Mónica, se perfectamente bien donde vives…en tu casa en una hora ¿OK?

-Te espero.

Mónica se puso un vestido a medio muslo entallado por la cintura, unos zapatos de tacón, se maquilló y se perfumó, se miró al espejo y se gustó, bajó a esperar a Eduardo, cuando el llegó la saludó con un beso en la mejilla y la llevó a un restaurante de lujo, comieron, bebieron buen vino y platicaron por un buen rato, Eduardo le dijo

-Mónica, ¿porqué nunca aceptaste tener relaciones conmigo?

-No era correcto Eduardo, además éramos muy jóvenes.

-¿Fué solo por la edad?

Mónica no respondió, solo se le quedó mirando a los ojos y Eduardo preguntó

-¿De ser mayores lo hubieras hecho conmigo?

-No lo sé Eduardo, yo era virgen, pienso que me hubiese dado temor, me sentía atraída, me gustabas, pero es muy difícil pensar en lo que puso haber sido.

-¿Te gustaba, te atraía?, eso quiere decir que ya no.

-No, no digo eso, es que ahora sé que no basta la atracción, debe haber algo más, cariño, confianza, unión… algo especial entre hombre y mujer

-¿Algo que no sentías, ni sientes conmigo?

Mónica lo miró a los ojos nuevamente y permaneció en silencio, Eduardo pidió la cuenta y después de pagar le dijo a Mónica

-¿Quieres ir a mi casa?, te presentaré al futuro novio de tu Laica, "El Capitán" una maravilla de perro pastor y te invito una crema de chocolate que traje del Canadá.. ¡exquisita!

-¿Solo veremos a los perros y tomaremos una copa de ese licor?

-Haremos lo que tú quieras

-¿Lo prometes?

-Siempre he sido un caballero

-Eso si me consta

A las 2 de la mañana regresaron a casa de Mónica, se despidió de Eduardo con un beso en la mejilla, el le dijo "¿Solo eso?", ella respondió "¡¿Solo eso!?, vaya, que más querías" se bajó del auto y entró a la casa, la recibió la perra, puso sus manos en la cabeza de la perra y le dijo "Ya te conseguí un novio guapísimo, para que tengas muchos cachorritos", entró a la casa, subió a su recámara, se desvistió quedando solamente en panty, se miró al espejo, sonrió y sin ponerse su camisón se metió a la cama y se durmió.

Al día siguiente por la noche le habló Gustavo.

-¿Mónica?

-Dime

-Regreso en 15 días, creo que debemos platicar sobre lo nuestro y llegar a una solución.

-Me parece bien, por mi parte ya lo he pensado mucho y creo que podríamos empezar de nuevo, claro si tú quieres, si te intereso, si aún me tienes un poco de cariño, no sé ¿qué has pensado tú Gustavo?

-Ya tomé una decisión Mónica, pero no quiero platicarla por teléfono, quiero hacerlo frente a frente.

-Ok

Se despidieron y Mónica quedó segura de que le pediría el divorcio, prefirió no pensar, no quería imaginar que había otra con la que ya compartía su vida, simplemente aceptó que su matrimonio había dejado de existir, se sentó frente al televisor y lloró, secó su llanto y se metió a la cama a dormir. A la mañana siguiente salió como se había hecho costumbre a montar en bicicleta con Jesús, habló poco y al regresar de la montaña Jesús le preguntó.

-¿Vamos a desayunar?

-No Jesús, hoy no, hoy me siento mal.

-¿Estás en… tú sabes, esos días?

Mónica rió y le respondió que no, platicándole lo que había pasado con Gustavo, él le preguntó "¿Te pidió el divorcio?"… "No, no lo hizo"…"Entonces anímate mujer, no pienses que tiene que ser lo peor"…ella respondió…"En eso tienes razón, debo esperar a que regrese para saber que decidió"…"¡Claro!, además ya sabes que yo estaré aquí para apoyarte" y en plan de broma dijo "Y podría ser mi oportunidad", Mónica respondió "Qué tonto", le dió un beso en la mejilla y regresó a su casa. Pasó la mañana limpiando la casa evitando pensar en lo que le había dicho Gustavo, como a las dos de la tarde sonó su celular, era Eduardo.

-Hola Eduardo

-Que tal, estaba pensando si comemos juntos.

-No, no Eduardo, estoy muy, no sé, triste, deprimida, no, mejor no

-OK

Cortaron la llamada y ella subió a bañarse, saliendo del baño sonó nuevamente su celular y era Eduardo otra vez, cuando respondió él le dijo "¿Dónde estás, llevo un buen rato tocando en la puerta de tu casa"…"Me estaba bañando, espérame un minuto y te abro", Mónica se puso su panty y una bata y bajó a abrirle a Eduardo, él le dió un beso en la mejilla entraron a la sala y se pusieron a platicar, ella le platicó lo que había pasado con Gustavo y él le dijo "No te desanimes por unas palabras, él te dijo que lo quería platicar contigo, espera a ver que te dice"… Mónica cruzó la pierna, la bata resbaló por su muslo dejándolo desnudo ante la vista de Eduardo, siguieron platicando y de pronto él le dijo poniéndose de pie…"Me voy Mónica, si te sigo observando en esa bata te voy a comer viva mujer"…Ella le sonrió diciendo "De eso estoy segura", se puso de pie y salió a despedirlo a la puerta de la calle.

Mónica dejó de ir a montar en bicicleta, por momentos el llanto regresaba a sus ojos, le decía a Laica "¿Porqué se hacen estas cosas, porqué no somos simples en la vida, todo lo complicamos con nuestras acciones y nuestras palabras?"… De pronto recordó que era viernes, vió su reloj ya eran las 10 de la noche, tomó el directorio telefónico y buscó un número lo marcó, le respondió el empleado del hotel, pidió hablar con Alejandro y después de unos momentos escuchó una voz varonil, grave pero dulce

-Diga

-¿Alejandro?, soy Mónica

-Que maravilla, que dulzura de voz tienes muñeca, tenía que ser así.

-Gracias Ale, ¿Cuándo quieres que nos veamos y te regale esas dos horas?

-Yo quisiera que fuera hoy y toda la noche, pero además de que cumpliré mi palabra de no intentar nada, no sería prudente que a esta hora salgas sola de tu casa, ¿Te parece bien mañana?

-Si, tú dime donde

-No conozco León, fué un triunfo dar con el hotel, ¿te importaría que nos viéramos aquí?

-Solo si es por la mañana.

-Por favor Mónica, cumpliré mi palabra…Pero está bien, ven por la mañana y nadamos un rato en la alberca ya que hace un calor endemoniado.

-Me gusta la idea, a las 11 de la mañana te busco en el hotel.

-¡Hecho!, un beso y gracias por dejarme escuchar esa voz tan linda que tienes.

-Ay, gracias, pero si sigues llenándome de halagos no te dejaré cumplir tu promesa

Rieron y cortaron la llamada Mónica subió a dormir, al día siguiente, se bañó, se maquillo, se probó sus bikinis, tomó el de color rojo y lo puso dentro de un bolso, se vistió con una falda a la cadera y a medio muslo, se puso una camiseta de tirantes, se calzó unas sandalias y salió hacia el hotel. Llegando a la recepción preguntó por Alejandro y la respuesta del encargado fué "¿Usted es la señorita Mónica?"…"Si, yo soy"…"El señor la espera en el restaurante"…Mónica caminó hacia el restaurante, había varias personas en el, se quedó parada en la puerta por unos instantes y vió que un hombre alto se levantaba de su mesa y se acercaba a ella preguntando "¿Mónica?", ella lo vió de cerca, alto, fornido, cabello castaño claro, piel blanca y ojos claros, sintió un escalofrío recorrer su cuerpo y dijo "Si, ¿eres Alejandro?"… "El mismo, ven pasemos a la mesa, ¿quieres algo?".. "No, bueno sí un café, pero permíteme pasar primero al tocador"…"Adelante muñeca"

Cuando Mónica regresaba del baño caminando entre las mesas Alejandro la miraba, había algo especial en ella, no solo era una mujer muy bella, había algo en ella que la hacía encantadora, observaba como los hombres que estaban en el restaurante la volteaban a ver, cuando llegó a la mesa él se puso de pie para acercarle la silla, ella recordó como Gustavo hacía lo mismo siendo novios, él se sentó frente a ella y comenzaron a platicar, después de un rato él le preguntó

-¿Trajiste tu traje de baño?

-Si, aquí en mi bolso.

-¿Subimos a la habitación a cambiarnos?

-Nooo, no me pienso arriesgar, tú cámbiate en tu habitación y yo me pongo el bikini en el baño

Alejandro hizo cara de resignación y subió a cambiarse, cuando bajó a la alberca, vió que Mónica seguía vestida sobre un camastro, se acercó y preguntó

-¿Y el bikini?

Mónica observó el cuerpo de Alejandro, era un hombre muy atractivo, ella se puso de pie, se quitó la camiseta y la falda diciendo "Aquí, debajo de mi ropa", Alejandro la observó incrédulo y le dijo.

-Preciosa, realmente eres preciosa.

Se quedaron en silencio unos momentos mirándose fijamente a los ojos y Mónica le dijo

-¿Nos metemos al agua?

Estuvieron dentro de la alberca nadando y platicando, Alejandro pidió unas copas y bebieron sentados en la orilla de la alberca, poca gente había en la alberca y la disfrutaron por momentos únicamente para los dos, el tiempo pasó sin darse cuenta y como a las tres de la tarde él le preguntó

-¿Tienes hambre?, te invito a comer.

Mónica le respondió

-No Ale, ya te dí mas de dos horas, me pondré un rato bajo el sol para secarme para vestirme y dejarte___Y pensativa agregó___Ya te cumplí mi promesa como amiga.

-OK, si quieres vamos a la habitación, te das un baño y te cambias ahí.

-¿No intentarás nada?

-¿En que quedamos muñeca?

-Vamos

Mónica vió su reloj terminando de cenar, eran las 9 de la noche, le dijo a Alejandro

-Ahora si ya me voy, las dos horas se convirtieron en todo el día, te tenías que salir con la tuya.

-Mañana me regreso a Querétaro y quiero que sepas que éste fue el día mas maravilloso de mi vida

-¿De verdad?

-Puedes estar segura…

-¿Sabes?...Me va hablar Gustavo y no sé que decirle, me da miedo que me pida el divorcio

-Muñeca, me gustaría pasar la noche contigo, me gustaría que huyeras conmigo a donde nadie sepa quienes somos, me gustaría que fueras mía toda la vida.

Mónica puso su mano sobre la de Alejandro diciendo

-Eres muy lindo, eres una persona especial, dulce, tierno, y a la vez seguro de ti mismo, No puedo complacerte, ya ves, mi voluntad está comprometida.

-Mónica….No soy psiquiatra pero siempre me ha interesado la mente humana y la he estudiado desde muchos aspectos…Sé que Gustavo no te va a dejar, y no lo digo para animarte, no Mónica, realmente tengo interés en ti como mujer y me gustaría que terminaras con él, pero prefiero que seas feliz a su lado a tenerte que recoger en pedazos.

Mónica con lágrimas en los ojos se puso de pie, él se puso de pie y le dió un beso en la mejilla y en las dos manos, ella tomó una servilleta desechable, secó sus ojos y solo dijo

-Adiós Alejandro, debemos cumplir la promesa que nos hicimos hace unas horas, solo te buscaré si todo se acabara entre él y yo….Me encantó conocerte… Que absurda es la vida, sé que te extrañaré y sin embargo no me gustaría volver a saber de ti.

Mónica se dio la vuelta y cuando comenzaba a caminar Alejandro le dijo

-Por cierto, no soy casado, ni nunca lo he sido, a diferencia del amor el matrimonio es muy complicado.

Mónica había detenido su marcha y no volteo a verlo, solo lo escuchó, levantó su mano sobre su cabeza y no volteo a verlo nuevamente, salió del hotel, subió a su camioneta y se dirigió a su casa, el llanto salía de sus ojos, llegó a su casa, guardó la camioneta, cerró con candado las puertas, acarició a Laica, entró en la casa con la perra detrás de ella, cerró con pasador las puertas, entró a la cocina, abrió la puerta del traspatio, subió a su recámara, dejó su bikini dentro de la regadera, mañana lo lavaría, salió y se sentó en el sofá del hall, encendió el televisor, de sus ojos brotaba el llanto, Laica se acercó, soltó un suave chillido, ella la acarició diciendo.

-No me pasa nada chiquita, lo conocí por internet y nos hicimos buenos amigos y hoy lo conocí realmente como es, y me duele, me duele perder a un gran amigo, pero hubiese terminado enamorada de él…Sé que no me entiendes, pero hoy pasé el día al lado de un verdadero caballero, el sueño de cualquier mujer…Así era Gustavo, pero se le olvidó…Por pretender ser esposo perdió ese encanto maravilloso y seductor de ser caballero…Y tal vez yo olvidé como ser una dama…Y sin dama pues no puede haber caballero y sin caballero no puede haber dama…En fin a ver en que termina todo.

Sonó el teléfono y habló con Gustavo, no se tocó el tema de su relación, terminando de hablar y ella se fué a dormir.