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Y me convertí en mamá (1)

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¡No Pedro, no seas loco!, te dije pero no escuchaste mis palabras y tu boca se pegó a mi pecho, no pude decir nada más, algo dentro de mi me hizo sentir completamente unida a ti, te separaste y juntaste tu boca a la mía para que juntos saboreáramos lo que de mi pecho tomaste…Sin duda para ti fué algo muy excitante ya que al hacerlo de inmediato sentí tus chorros de semen en medio de mis muslos

Aún no puedo hacer el amor, hace ya tiempo que lo evitamos, primero fué porqué te daba miedo en los dos últimos meses de embarazo y ahora estoy suturada en mi sexo y al tocarme aún siento dolor…La verdad amor es que no tengo deseos, dice Humberto que es normal por las hormonas que se están nivelando, ajustando o no se que demonios, pero yo me siento muy rara. Sin embargo te amo y te quise complacer, te pedí que te desnudaras y yo hice lo mismo, besé todo tu cuerpo y con mi boca te dí eso que te encanta…

No puedes negar que sentir tu pene dentro de mi boca te enloquece y la verdad a mi me encanta hacerlo. Soy una mujer y como tal disfruto y me gusta hacer disfrutar a mi hombre al máximo… Nos acostamos de lado uno frente al otro, puse gel lubricante sobre tu pene, levanté mi pierna y lo puse entre mis muslos apretándolo entre ellos, tú te movías como si estuvieses dentro de mi y yo sentía como mi piel lo acariciaba, apreté mis piernas con fuerza para aumentar tu placer, tus manos acariciaban mi cuerpo y en tu cara había ese gesto que pones cuando estás disfrutando de mi, gemías diciéndome "Ya me hacías falta amor" y yo estaba feliz de complacerte, de hacerte gozar, de poder ser la mujer que te llene de placer aún sin ser penetrada.

Tus manos acariciaron mis pechos y ellos respondieron perlando con unas gotitas blancas sus pezones, quedaste inmóvil observándolos con tu pene entre mis muslos y juntaste tu boca a mi pecho, pretendí evitarlo pero no pude…Me gustó amor, sentí que me amabas, que te amaba, que querías comer de mi, que deseas todo lo que mi cuerpo sea capaz de dar, que te hago falta, que me necesitas….¡Juro que me volviste loca!, y hacerlo te llevó al clímax, ya que al juntar tu boca con la mía de inmediato tu semen se derramó entre mis muslos…Posiblemente tú sientas lo mismo cuando te he llevado a terminar dentro de mi boca…¿Qué sentiste amor?, ¿Tendrás palabras para explicármelo algún día?.....Yo no las tengo, ¿Cómo puede explicar una mujer ese sentimiento de amamantar ?....¿Darse por completo a quien amas?... No lo sé, yo solo sé que me encantó que lo hicieras.

No dejé que te movieras y con tu pene entre mis muslos perdimos la conciencia y nos quedamos dormidos, el llanto de nuestro hijo nos despertó, yo permanecía acostada de lado, no me moví en el poco tiempo que dormimos, tú estabas boca arriba acostado junto a mi, al moverme sentí mis muslos "pegados" por el semen que derramaste entre ellos, me puse una bata sobre mi cuerpo desnudo y levanté al niño de su cuna, tú medio dormido caminaste hacia la puerta de la habitación, yo te dije "Déjalo amor, yo voy" y respondiste "¿Dos onzas verdad?"…"Ya están preparadas dentro del refrigerador, solo caliéntala a que quede tibia" respondí riendo al verte salir rumbo a la cocina completamente desnudo… Esto de ser papás nos tiene locos.

Cuando regresaste con el biberón yo ya lo amamantaba y pusiste esa cara de ternura al verlo alimentarse de tu mujer, yo traté de levantarme diciéndote "Me voy a la otra habitación, tú duérmete que mañana tienes que trabajar", no me dejaste hacerlo, tomaste tus almohadas diciéndome "gracias amor, te adoro" y saliste desnudo a dormirte a la otra habitación, quedé en silencio y a mi mente regresaron las imágenes de los tres días en el hospital….Al llegar nos pasaron a un cuarto pequeño que le dicen de "trabajo de parto", me desnudaron, me afeitaron, me pusieron un líquido que me pintó de anaranjado el pubis, y cada hora el médico residente entraba y metía sus dedos en mi vagina y ponía sobre mi vientre esa "corneta" para escuchar el corazón del bebé

Recuerdo que la mujer que ocupaba el cuarto de al lado gritaba, me tenía harta, a mi no me dolían las contracciones, solo mi vientre se endurecía como piedra y sentía un jalón en mi cintura, no entendía los gritos de esa mujer…Fueron las últimas contracciones ya en la mañana y poco antes de entrar a la sala de expulsión las que me hicieron comprenderla y compadecerla. ¡Qué horror!, era como si me apretaran con unas pinzas enormes y me quisieran partir a la mitad. Cuando llegó Humberto me hizo un tacto y dijo "Güerita, este muchachote ya quiere salir para crecer a sus anchas", recuerdo el ardor de la anestesia en mis labios vaginales, mi entrepierna se durmió y después me decían "Puja, no, no, espera, otra vez puja" y a los tres pujidos salió él de mi para iniciar su propia vida, al hacerlo sentí como todo en mi se relajaba, no te rías, pero fué algo similar a un orgasmo, después de una enorme tensión el relajamiento total.

Escuché llorar a nuestro hijo y cuando Humberto lo puso sobre mi vientre fuimos nosotros los que lloramos, lo quitó de mi vientre el pediatra, supongo que para limpiarlo, tomarle la huella de su piecito y no sé cuantas pruebas mas que les hacen a los recién nacidos, nosotros permanecimos un tiempo mas ahí, yo con las piernas levantadas y mis pies sobre los soportes de la mesa y tú a un lado de mi, yo no sentía nada pero según tu primo Humberto salió la placenta y suturó el corte que hizo en mi vagina o no sé donde, tomó mis piernas por los tobillos para ponerlas sobre la mesa y me dijo "Qué buenas piernas primita y que bonitos pies" y sentí un gran descanso al cambiar de postura, Humberto y tú salieron y a mi me sentaron para que una enfermera me vendara el vientre, me subieron a una camilla y me llevaron a la sala de recuperación…Es desesperante, yo quería estar en mi cama tranquila y dormir un rato. Yo les decía que había sido un parto normal, que no me habían anestesiado, pero solo se reían diciéndome "Un ratito más señora, ya pronto la llevamos a su habitación"

Fué Humberto el que me libró de ese suplicio de frío y soledad, sus palabras sonaron en mis oídos como música celestial "A la señora pásenla a su habitación, ella no tiene que estar aquí" Sacaron la camilla y me llevaron a la habitación donde tú me esperabas, al ponerme sobre la cama yo veía mi vientre plano, me impresionó como cambie mi figura en unos minutos, sentía un bulto en mi entrepierna, eran gasas y una especie de toalla sanitaria, me quería bañar, me sentía muy sucia, sentí varios de esos cólicos que dan cuando el útero comienza a regresa a su forma normal, les dicen "entuertos" y me dió risa el nombre, recordé al Quijote y al poeta Alma Fuerte.

Es horrible cuando la gente entra a felicitarte y tú te sientes sucia, cansada, sudada, todos me decían "Andrea, te cortaste el cabello" y yo quería gritarles que si, que me corte el cabello porqué me dió la gana, que salieran, que no pretendieran distraerme con estupideces, deseaba tranquilidad, silencio, dormir…Pero debía sonreír y hacerle fiesta a los regalos que le llevaban al niño, Un primo tuyo llevó una pelota y unos pequeños zapatos con esas cosas en la suela para jugar futbol…¡Qué ocurrencia de hombre!, yo lo quería matar cuando los puso sobre la cama.

Yo sé que lo hacen con mucho gusto y agradezco en el alma su interés, pero es que una está tan molesta que tiene ganas de gritar ¡Déjenme dormir!… Fué al día siguiente cuando me metí a bañar, la enfermera pretendió acompañarme al baño, pero tú te negaste a que ella lo hiciera y te metiste conmigo bajo la regadera, disfruté tanto del chorro del agua caliente sobre mi cuerpo que no me quería salir… Tú secaste mi cuerpo, primero me molestó ya que me hacías sentir una inútil, pero lo hiciste como te gusta, "Secando y fajando" como tú dices y tus caricias siempre son muy placenteras. Antes de salir del baño la enfermera vendó nuevamente mi vientre, me dejaron usar mi camisón pero sin ropa interior, ya en la cama me hizo una "curación" sobre la herida de mi sexo y lo cubrió nuevamente con las gasas.

Ya pasó todo, ya tenemos una semana en casa, me convertí en mamá unos días antes de cumplir los 20 años. Quisiera decirte algo, pero ¿Cómo decirlo?... Tal vez solo pueda escribirlo pero quiero que sepas que tú llegaste a cambiar totalmente mis expectativas de vida

Yo soñaba con regresar a mi patria, hacer una carrera y quedarme a vivir allá, tal vez me casaría a los 27 o 28 años, y si eso no era posible soñaba con un noviazgo normal y casarme al terminar mi carrera en la universidad a los 24 o 25 años, pero te cruzaste en mi camino y no te quise soltar, cambiaste mis sueños y yo los tuyos por un sueño nuevo que hemos venido realizando cada día desde hace casi 4 años y hoy se corona con nuestro primer hijo…Es increíble, realmente increíble sentir como un ser humano se va formando dentro de una. No, no perderé mi tiempo en explicarte, nunca lo podrás entender, tú no eres mujer… Sin embargo todo ha sido desconcertante para mí, me siento perdida, yo tenía planeada mi vida y ahora ya no sé hacia donde voy, simplemente te sigo llena de amor, pero no dejo de tener miedo, me he vuelto absolutamente dependiente de ti y más ahora que tenemos un hijo…

Me hacías enojar cuando me decías que tu testamento y tus pólizas de seguros de vida, estaban en la caja de seguridad del estudio…¿¡A quien se le ocurre hacer su testamento a los 24 años!?... Nunca las vi y ahora me odio por haberlas revisado cláusula por cláusula… ¿A que le temo amor?... ¿A que mueras a los 27 años?... ¿Por qué este temor…? Sin embargo ya lo decía Juan de Dios Peza "Cuando la vida dice aún soy tuya, aunque sepamos bien que nos traiciona"… ¡Demonios, me odio, odio mis pensamientos y mi temor!, ha de ser la famosa depresión post parto, le he hablado casi diario a Humberto, ya ha de pensar que me gustó que tocara mis piernas…El le pidió a su esposa Angélica que estuviera al pendiente de mi y ella me habla todos los días…Dicen que esto se quita al presentarse nuevamente mi menstruación, pero no deja de ser horrible.

Las lágrimas llenan mis ojos mientras le ofrezco al niño mi otro pecho. Hemos pasado por mucho. Nos ha sido difícil lidiar con los prejuicios sociales, el decir de la gente, yo era la adolescente putita que se dejó embarazar por el novio y tú un asalta-cunas, incluso en el hospital una enfermera me dijo "Niña, si te hubieras cuidado no estarías pasando esto sola" ¡Carajo!, yo no estoy sola tengo un marido que me ama y yo a él y somos papás de un hermoso niño.

Dejé correr mi llanto y me quedé dormida con nuestro hijo a mi lado en nuestra cama, ya se despertó nuevamente, son tres horas amor, cada tres horas se despierta a comer y es un tragón se devora a la mamá y hay que completarle con un biberón de formula, y si a esas tres horas le descontamos que debe arrojar gases, el cambio de pañal y todo lo demás, solo duermo dos horas entre comida y comida, estoy agotada, muy agotada, llena de este sentimiento de tristeza y temor, ¡Es horrible amor!. Tomé a nuestro hijo nuevamente entre mis brazos y le dí mi pecho, al menos veo que mis pechos han crecido, si se quedaran de este tamaño pienso que me vería muy bien, muy buena como dicen en México, entraste a nuestra habitación con el biberón en la mano y con una cobija sobre tu cuerpo desnudo, te recostaste a mi lado y te quedaste dormido, pretendí despertarte para que fueras a dormir a la otra habitación, pero ya daba lo mismo, en dos horas amanecería y te tendrías que levantar para salir a trabajar, te observé dormir y pensaba en que ya son dos veces que has dormido en un cuarto de hospital por mi culpa, primero el apéndice y después el parto…

Te salí defectuosa, pero ya se te venció la garantía, "Dos años o cincuenta mil kilómetros" te dijo bromeando mi papá el día de la boda, ¿Cómo se medirán los kilómetros en una mujer?…Si es como pienso la garantía se te venció a los pocos meses de casados, sonrío de mi pensamiento y bajo la cabeza para observar a nuestro hijo comer de mi pecho, pienso que es muy lindo, mis papás aseguran que se parece a mi y los tuyos dicen que se parece a ti, eso es señal inequívoca de que es un niño hermoso, de otra forma dirían "se parece a tu suegro"…mientras amamanto a nuestro hijo a mi mente regresan los recuerdos…¿Cómo llegamos a esto?

Todo comenzó una tarde cuando regresé del colegio y tú estabas en la sala con mi hermano Derek, ¿Sabías que mi hermano se llama Karl Heinrich Derek?, pobre, yo creo que los primeros nombres se los pusieron por Marx…y Derek por mi abuelo, pero eso no viene al caso…Yo tenía 15 años, estaba por cumplir los 16, me acerqué a saludar, Derek nos presentó y mientras estaba de pie en la entrada de la sala noté tu mirada fija en mis muslos entre la falda y las calcetas del uniforme escolar, me sonrojé, ¿Cómo no hacerlo si soy hija de una familia muy tradicional?, mi pudor me venció y subí a mi habitación a cambiar mi falda. Te invitaron a comer en casa con mi familia, yo te miraba y cuando mirabas hacia mi yo bajaba la vista para disimular, pero tú sabias que te miraba, que me gustabas, pocas palabras cruzamos la mayor parte del tiempo platicaste con mis papas y mi hermano.

Al despedirte nos dimos las manos y fijaste tu mirada en la mía sin soltar mi mano, "Me dió mucho gusto conocerte Andrea" dijiste y yo me sonrojé nuevamente, no respondí nada y tú simplemente te retiraste. Por la noche ya que te habías ido, Derek me dijo en alemán, como hablamos siempre en familia "Andrea, dice Pedro que estás buenísima", yo inocente pregunté "¿Y como sabe que soy buena, si no me conoce?", el rió y me dijo "Buenísima hermana, que tienes buen cuerpo y que le gustaría acostarse contigo, eso quiere decir estar buena en México" yo respondí con enojo "Que amigo tan majadero tienes, ¡lástima! ya que es muy guapo".

Me metí a mi habitación enojada, sin embargo me sentía, ¿bella?, ¿atractiva?, de verdad que no lo sé, pero te confieso que pasé un rato desnuda frente al espejo observando mi cuerpo y me vi hermosa, nunca había sentido eso y no creo poder explicarlo, pero saber que te gustaba al grado de desearme hizo que por primera vez en mi vida me sintiera mujer y no la niña de la casa… Así era mi educación, no había lugar para los instintos y sentimientos, la edad marcaba la pauta en todo y yo aún no tenía derecho de sentirme mujer, a los 15 se es una niña y no puede estar una observando su cuerpo desnudo frente al espejo, me puse mi panty y mi camisón y me metí a la cama esperando soñarte.

Tus visitas a la casa se hicieron frecuentes, yo notaba que te gustaba platicar conmigo y a mi me encantaba que me buscaras. Un día me senté en la sala con ustedes, vestía el uniforme escolar, la falda gris estaba a la mitad de mis muslos, cuando pretendí bajarla por pudor noté tu mirada fija en mis piernas y la coquetería femenina me hizo dejarla como estaba, sin duda que saberse deseada como mujer logra vencer cualquier tipo de educación, o tal vez eso que sentía en mi estomago al estar contigo era que me estaba enamorando y quería conquistarte. Nunca te he preguntado si Derek estaba de acuerdo contigo, yo creo que si, ya que siempre me pedía que los acompañara.

Cuando mi hermano salió de la sala y quedamos solos me dijiste "Andrea, eres muy bella, me gustas, ¿acéptame una invitación a cenar?", me dió temor y a la vez me sentí feliz, era la primera vez que alguien me invitaba a salir, te dije "Si acepto, dime cuando para pedir permiso".. "Hoy mismo, en este momento", fué tu respuesta y que alboroto familiar se armó cuando pedí permiso. ¡¿Como su niña iba a salir con un muchacho?!, no era correcto a su edad, y más que el chico en cuestión era casi 8 años mayor que ella…Sin embargo se me dió el permiso con el clásico "Se portan bien y regresan a la 10 a más tardar"… ¿Qué querrán decir con "se portan bien"?, seguro significa "No se les ocurra tener relaciones", no creo que pretendan decir "No se vayan a robar un auto"….

Salimos a cenar y era mi primera cita, ¿sabes que para nosotros "cita" significa algo serio entre hombre y mujer?... Si invitas a salir a una amiga es diferente a proponerle una cita, pero cita o no salimos juntos, yo me había cambiado el uniforme por un vestido entallado a medio muslo, mi mamá me ayudó a vestirme y maquillarme, fué Derek, el que me dijo que no usara medias y luciera lo blanco de mis piernas que a ti te gustaban mucho aún siendo tan blancas, y muy a mi pesar lo hice. En el restaurante tú pretendiste impresionarme pero fué un fracaso, ¿Te acuerdas?.. "A la señorita no le podemos servir alcohol si no se identifica como mayor de edad" Qué cosas le pasan a uno cuando se está en esos menesteres de conquistarse mutuamente.

Tú te solidarizaste conmigo y nuestra cena romántica se acompañó con sodas (refresco de cola). Sin embargo tú cometido se había logrado…La niña se había enamorado, ¿Cómo lo tomarían en casa? Al salir del restaurante tu mano se posó sobre mi cintura y tu vista en mis pantorrillas, yo reprimí un enorme deseo de juntar mi cuerpo al tuyo y quedar entre tus brazos…Amor y deseo son fieles compañeros siempre afloran juntos desde interior de las personas.

Me llevaste de regreso a casa, nos despedimos en la puerta y ya dentro mi mamá me preguntó sobre como me había ido, si había estado contenta, incluso si me habías besado... Todo lo que una mamá quiere saber sobre la primera cita de su hija, yo le platique todos los detalles fingiendo que solo me había divertido con un amigo, pero una madre conoce bien a sus hijos, me miró a los ojos y me dijo "Hija, estás enamorada"….Yo lo negué, ¿Por qué costará tanto trabajo aceptar que se está enamorada?, pero ella sonrió y me dijo "Me da gusto que sientas eso tan especial, sin embargo creo que aún eres muy joven, ya se te pasará, solo espero que en este despertar al amor no salgas lastimada"…¿Se me pasará?.. ¡Que equivocada estaba mi madre!... Y le ha tocado a la pobre hacerle de mamá-abuela, todos los días viene por la mañana a pasar el día conmigo y eso me permite dormir un poco más entre las comidas de mi tragón.

Doblo mis piernas para poner a nuestro hijo sobre la cama y cambiarle el pañal, ya aprendí, dos veces me mojó al quitar el pañal sucio, ya no me la vuelve a hacer, ahora abro el pañal sucio, el cambio de temperatura lo obliga a hacerlo, pero yo lo cubro con el mismo pañal. Observo mis pies mientras él hace su chiste sobre el pañal y no sobre su mamá…. Pies bonitos me dijo Humberto ¿Bonitos?..Si supiera que calzo del 6 1/2, y el trabajo que me cuesta encontrar zapatos pensaría de otra forma…Cambié el pañal y ahora le debo dar la formula, lo sostengo entre mis brazos y sigo recordando lo nuestro.

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