El sueño de Pablo fué interrumpido por unos gritos infantiles, adormilado entreabrió los ojos y al notar su mano sobre el vientre de Ana un reflejo inconsciente lo obligó a retirarla, se descontroló durante esos segundos que toma a la mente regresar de un sueño profundo y ya consciente de la realidad sonrió al recordar el excelente sexo que habían tenido, se movió para quedar boca arriba, puso su antebrazo sobre sus ojos pretendiendo dormir nuevamente pero a su mente regresó al momento en que Ana con su cabeza recostada sobre su pecho le había dicho que su amiga, la que aseguraba haberse desmayado con un orgasmo y que ningún hombre la podría hacer gozar como lo hacia su esposo, esa mujer, la amiga de Ana, era su esposa Ximena.

El no había pronunciado palabra alguna al escuchar la confesión de Ana respecto a la plática que habían tenido con Ximena, escucharlo había sido como un golpe que lo dejó noqueado y no recordó en que momento la respiración tranquila y pausada de Ana sobre su pecho lo había contagiado del sueño que invade después de un sexo agotador…."Ximena, Ximena, ¿Qué fué lo que pasó entre nosotros?, ¿Qué hacemos metidos en ésta locura?", se dijo mientras quitaba el brazo de su cara, hacía calor, volteó hacia la rejilla del aire acondicionado y observó que no salía aire por ella, miró la cortina y el cancel del balcón abiertos, se dijo "Con razón carajo…No cerramos el balcón, ni encendimos el aire". Se enderezó hasta quedar sentado en la cama, a sus cuerpos desnudos no los cubría la sábana, se habían quedado dormidos sobre de ella.

Observó a Ana que dormía placidamente boca arriba, tenía una de sus piernas estirada y la otra doblada hacia un lado con la planta de su pie tocando la otra pierna lo que dejaba a la vista su sexo, Pablo le miró los labios vaginales de un color rosa similar al de sus pezones, recordó con que pasión los había disfrutado con su boca para después sentirlos abrirse al paso de su pene permitiéndole disfrutar del calor húmedo e inigualable de las entrañas femeninas, imaginó sus chorros de semen golpear dentro de la vagina la que después de ser abandonada por el pene había dejado escurrir el calido y viscoso líquido sobre el resto del femenino sexo

Sonrió satisfecho moviendo la cabeza ante el inconsciente y maravilloso espectáculo que Ana le ofrecía con su postura, la observó pensando "Que delicia de mujer, que rostro tan bello tiene…Y que manera de coger la suya, es increíble…No le basta con estar buenísima, además coge como diosa", se levantó despacio de la cama y entró al baño, al salir tomó su calzón que estaba en el piso junto a la cama, se lo puso y salió al balcón, la luz del sol de la mañana frente a él lo hizo entrecerrar los ojos, se asomó por el balcón y notó que los gritos de algarabía provenían de los niños que jugaban dentro de la alberca, tomó la ropa de Ana que había quedado en el balcón, entró a la habitación y cerró el cancel y la cortina para después encender el aire acondicionado.

Se paró frente a la rejilla del aire para recibirlo en la cara, se giró y permaneció observando a Ana dormir desnuda sobre la cama, recordó sus gemidos, sus gritos, su respiración agitada, sus besos, sus mordidas, su cara sonrojada y el sudor producto de la pasión humedeciendo su cuerpo, recordó las palabras de ella al definir el sexo como "Cuerpos ardientes, sudados, intercambiando fluidos y ansiosos de placer", y vaya que tenía razón, en todo ese precioso cuerpo había quedado su saliva mezclada con su sudor, en la cara, la boca, el cuello, los pechos, el vientre, las piernas y en su dulce sexo, no había dejado sin besar y lamer un centímetro de esa blanca piel y su cuerpo sudado se había recostado sobre el de ella impregnándose de su suavidad, su calor y su humedad.

"Que mujer tan ardiente y sensual" pensó mientras se acercaba a la cama para observarla más de cerca, se quedó mirándole el sexo, sin duda sus labios y la parte interna de sus muslos estarían impregnados de fluidos vaginales y de semen al igual que lo estaba su pene.

Ana, quien posiblemente sintió entre sueños su presencia abrió los ojos, le sonrió y estiró su cuerpo juntando sus piernas y levantando sus brazos mientras gemía y habiéndose estirado lo saludó diciendo

-Buenos días amor, ¿Cómo dormiste?

El se inclinó sobre de ella y le respondió "Incrédulo de haber comido de estos bellos pechos" y besó sus pezones, Ana sonrió y él agregó "Y más incrédulo de haber mojado con mi semen estos ovarios" se agachó para besar su pubis sobre la piel encima de sus ovarios y al presionar con su boca Ana gritó

-¡No Pablo, me orino!

Brincó de la cama y entró corriendo al baño, Pablo rió al verla correr desnuda hacia el baño, se sentó en la orilla de la cama con los pies en el piso y con sus manos recargadas en sus muslos, bajó su mirada a sus manos y mientras apretaba los dedos de una con los de la otra pensó en Ximena, ella era la que debería de haber despertado a su lado, ella era la que debería tener su cuerpo impregnado de su saliva y su semen. Ana era una mujer muy bella, con un cuerpo excelente, tanto o más que el de Ximena, cariñosa, dulce, ardiente, apasionada e incluso amorosa, pero en ella no había "ese algo" que sobraba en Ximena, Ana sería sin duda una gran compañera…"Solo que para el que la pueda amar" dijo en voz baja.

En ese momento Ana salió del baño corriendo hacia él y se le echó encima haciéndolo caer de espaldas sobre la cama apoyando su sexo sobre su vientre, ella que no podía ocultar su felicidad le dijo.

-Ya me lavé la boca, así que dame un beso enorme

Juntaron sus bocas en un dulce y tierno beso, al separarse ella lo miró a los ojos y dijo

-Pienso que no solo mojaste mis ovarios, todo dentro de mi quedó impregnado de tu semen y ahí debe de estar acariciándome por dentro mientras busca inútilmente un óvulo fértil para fecundar… ¡Qué manera de venirte!...No tienes idea de la cantidad que escurrió sobre mis muslos, incluso lo tomé con mis dedos y lo probé….Te dejé vacío, agotado de darme tanto semen y te quedaste dormido muy pronto…. ¿Siempre te vienes así?..Me refiero a la cantidad…

-Solo cuando lo hago dentro de una verdadera mujer como tú….

-Adulador

-¿Te gusta probar el semen?

-Solo si me lo da un hombre como tú

-¿Yo soy el adulador?

-Te lo diré en plan serio…Me gustó sentir tú semen dentro de mi y como ya me lo habías dado a probar en la tarde con tu lengua no me molestó comerlo de nuevo…Lo malo es que te quedaste dormido, te hubiera encantado ver como lo recogía con mis dedos y lo metía en mi boca.

Ana se movió y sintió la erección que en Pablo había producido el contacto con su cuerpo desnudo, tocó el pene sobre el calzón y dijo

-Vaya, parece que no has quedado satisfecho, ¿Lo quieres ahora o después del desayuno?

-No Ana, no lo quiero__Respondió Pablo

-¿Noooo?, ¿Que de plano fui muy mala en la cama?

Pablo se trató de levantar y Ana se bajó de encima de él para quedar sentados en la orilla de la cama uno al lado del otro, Pablo le tomó la mano y le respondió

-No es eso Anita, al contrario, eres una mujer maravillosa, me diste una de mis mejores noches, eres ardiente y preciosa….En verdad estalló dentro de ti una bomba que me hizo vibrar llenando mi cuerpo de un placer indescriptible, lo que pasa es que….

-¿Es qué, qué amor?....Dilo, ya estoy lo suficientemente mayor como para saber que mi felicidad fué tan solo una noche de euforia.

-¿Qué edad tienes Ana?... ¿22?

-21 ¿Por?

-Te casaste a los 19, muy joven, Jorge es ¿Cuántos años mayor que tú? ¿Seis?

-Dieciocho…Me casé a los 18 y Jorge tenía 25….Pero si te refieres a que mi juventud y la diferencia de edades es la causa de nuestros problemas, pienso que te equivocas, lo nuestro no terminó por eso, a lo nuestro le faltó lo que le sobra a lo tuyo con Ximena….Amor Pablo…..Ximena tiene 23 y tú 26, ¿O no?... ¿Qué tanta diferencia puede haber?, ¿Acaso existe una edad en que se abre el interruptor del amor?, cuando nacemos está en "OFF" y a cierta edad se pone en "ON"

-No me refería a eso….me refería a que…. ¡Mejor olvídalo!

-Te voy a confesar algo, pero no lo comentes, entre Jorge y yo ya no hay nada, terminaremos divorciados…..Sin duda será lo mejor…..No queremos aceptarlo, pero no nos queda otra cosa por hacer….Y te aseguro que duele reconocer el fracaso…El fracaso de un matrimonio muy breve…Un poco más de dos años de los cuales casi uno ha sido un infierno de indiferencias mutuas.

-¿Te sientes fracasada?

-En mi matrimonio si…En lo personal más bien decepcionada por no haber sabido diferenciar entre el amor y el sexo…Como bien dijiste ayer, son tan fáciles de confundir…Pero sé que podré rehacer mi vida

-O sea que esto de cambiar parejas y que una semana eres mi esposa y todas estas pendejadas, no tenía razón de ser, su separación ya estaba decidida…

-Lo de la semana lo planeó Ximena…Y no hemos decidido separarnos…Aún…Pensábamos que un intercambio podría solucionar algo, pero no fué así, ya vi que lo nuestro no tiene solución y Jorge debe pensar lo mismo

-No creo que él piense lo mismo, ¿Por qué razón nos pidió terminar con este juego sino por celos?

-Lo conozco y estoy segura que lo hizo por ti y por Ximena….No por mí

-Pero bien que se cogió a Ximena

-Eso no lo sé Pablo, solo él y Ximena….Además tú querías que ella se acostara con otro.

-¿Y ella qué?... ¡También me lo pedía!, varias veces se hacía pasar por ti….Siempre ha querido verme cogiendo con otra….Y no con otra, sino contigo

-Seguro por complacerte ya que notó que siempre me has visto con deseo….Eso no lo puedes negar, desde que nos conocimos me has visto con deseo….Primero me avergonzabas y me molestaba, pero después me gustó.

-No, no niego que así era, ¿Era tan obvio?

-Para una mujer si, tenemos una especial sensibilidad para notarlo, ya sea que lo sientan por nosotras o por otra.

-Pues así era la cosa Anita, Ximena me decía…"Me gustaría ver como te coges a Ana"…Y aunque parezca mentira me lo llegó a suplicar.

-Pues ya se les cumplieron a ambos sus más íntimos y locos deseos de pareja, claro que ella no nos vió…Pero se podría hacer algo al respecto.

-¿¡Cómo crees!?... Los cuatro en la misma cama… ¡Que absurdo!

-No veo el por qué…Ya estamos metido en esto, ¿Que más se podría perder? Complacerías a Ximena y de sobra sabes que yo estoy dispuesta a que me uses para eso….

-Otra vez con la misma cantaleta de "ser usada".

-Olvídalo Pablo….No vale la pena discutir por eso…Solo recuerda que estoy dispuesta a hacerlo, por Ximena y por ti.

-¡Qué sacrificada!

-No es sacrificio y lo sabes, pero no me puedes negar que ha de dar vergüenza hacerlo frente a otros…Pero cambiemos el tema, platícame algo

-Mejor dime ¿Por qué no tiene solución lo tuyo con Jorge?

-Pablo, hace más de un año que no me siento mujer junto a Jorge, todo ese tiempo me he sentido infeliz….Y ahora que siento la felicidad de sentirme nuevamente mujer es por haberlo sido en tus brazos y no en los de él…Ahora yo te pregunto….¿Le ves solución?....

Pablo negó con la cabeza, más por evitar una discusión que por convencimiento y ella agregó

-No pienso decirte que Jorge es un maldito, un cabrón, un desgraciado hijo de puta…No Pablo, no hay rencor entre nosotros, nada me gustaría más en la vida que tener nuevamente al hombre que tuve al casarme, lo intentamos todo, pensamos que con esto renacería en nosotros esa chispa, pero ya ves que no fué así... Y era lógico, en nuestra relación ya no hay amor…Pienso que él siente lo mismo y al saber que ésta locura no cambió nada entre nosotros decidió que lo mejor era terminar esto y dejar que ustedes resuelvan sus diferencias, por cierto muy tontas, pero no dejo de reconocer lo que hizo Jorge ya que te aseguro que a Ximena la desea mucho….. Jorge es un buen hombre Pablo, pero somos muy mala pareja.

-¿Y como sabes que nuestras diferencias son muy tontas, tal vez sean demasiado grandes?

-¡Por favor Pablo!... Se derriten de amor, al grado de aceptar cumplirse sus caprichos… Caprichos estúpidos que al parecer tienen todos los hombres…Y también las mujeres, ya que muchas nos morimos de deseos por ver a nuestra pareja teniendo sexo con otra persona… ¿De donde vendrá tanta perversidad?...¿O tal vez sea normal?...¿Se han tomado uno a otro fotos desnudos?

-Si

-¿Y las has subido a internet?

-No…Me encantaría subir sus fotos desnuda, pero siempre me lo ha prohibido…Me gustaría que muchos vieran su cuerpo y se derritieran en deseos por tenerla.

-¿Por qué o para qué Pablo?

-No lo sé…Tal vez para que alguien en algún lado del mundo diga "Qué buena está" o se masturbe viendo su foto o la imprima y la pegue en la pared de su habitación…Me enloquecería que muchos la vieran desnuda, no tienes idea de lo que me excita que otros hombres la miren asoleándose en bikini

-Convéncela de subir sus fotos…

-Lo intenté enseñándole una página donde se suben fotos, la gente vota y se dan premios en dólares…Le dije que no usaría su nombre y que de seguro ganaría, pero no aceptó.

-Conozco la página…podrías cubrirle la cara

-No, ¡ni madres!, Ximena tiene una cara preciosa como para ocultarla

-Eso si…Y te garantizo que ganaría el premio, tu mujer tiene un cuerpo excelente y un rostro angelical….Pero debe de haber alguna razón para que sientas ese deseo, ¿Qué es lo que te mueve a desnudar a tu mujer para que otros la disfruten?... ¿Vanidad?... ¿Decirle a la gente..."Miren a la mujer que me estoy cogiendo"?... ¿O qué es Pablo?

-No sé Ana, realmente no lo sé, simplemente lo deseo sin una razón para hacerlo.

-¿Así cómo desear que otro se la meta y la disfrute para después sentirte infeliz por que lo hizo?...Pienso que al pedirle que cogiera con otro estabas seguro de que no lo haría

-Es posible

-O sea que ella se cansa de escucharte duro y duro con lo mismo, se cansa de no sentirse ella en la cama, la haces sentir que no hacerlo es la causa de que se estén alejando, ella decide hacerlo, lo hace y termina embriagada de tristeza…Y de alcohol… Pobre Ximena

-No sé, ella también me pedía que cogiera contigo y te aseguro que también me presionaba al grado de cansarme con eso…Además si Ximena está tan triste, ¿Por qué no termina con todo esto?

-¡Y yo que sé!, ¿Como puedo saber lo que ella piensa?, yo estoy dando mi opinión al respecto y nada más

-Es qué… ¡Demonios Ana!...Me gusta que otros la miren con deseo

-Pues has de vivir excitado, ya que Ximena es una delicia de mujer… Qué mujer tan buena tienes Pablo.

-Vaya…Lo dices de una manera muy sensual…Ahora me dirás que eres bisexual.

-Pablo…Todas las mujeres tenemos algo de bisexuales, dentro de nosotras tenemos a la mujer amorosa y fiel pero también a una lesbiana y a una puta… ¿No has escuchado aquello de "La puta que todas llevamos dentro"?....Solo hace falta quien nos haga sacarla y cuando son capaces de hacerlo los dejamos espantados del infierno que llevamos dentro… ¡Fieras amorcito!, fieras ansiosas de placer a las que no se les complace con una simple metida de verga y tal vez por eso preferimos a una mujer ya que entre nostras sabemos como y donde apagar nuestros infiernos.

-¿Lo has hecho con una mujer?

-Nop, pero si se presentara la ocasión no dudaría en hacerlo…Repito, hay que saber sacar a la fiera de su jaula…. ¿Sabes Pablo?, anoche me llenaste de placer, comenzando por las cosquillas que me hiciste.

-¿Te gustaron?

-Me dieron placer, el placer de comenzar, fueron algo así como "El motorcito de arranque"… Tu lengua en mi sexo me produjo un delicioso orgasmo, por atrás me molestó, no te digo que me hizo sufrir pero no es mi idea de un gran sexo.

-Tú me lo pediste

-Si, quería que me tuvieras por todos lados… ¿Sabes?... Tener el pene dentro de la vagina es delicioso, se siente una llena, ocupada por su hombre, los movimientos del pene acarician el clítoris y la vagina, se siente placer, mucho placer pero hay que estar preparada desde antes para que ese placer explote en un increíble orgasmo…. Cuando nos tienen ensartadas una está sintiendo pero también está esperando, esperando que se endurezca el pene ya que en ese momento sabemos que nos van a llenar de su placer y su semen…Y esa espera conscientes de lo que nos van a dar…ufff, ¡Es excitante!… ¡Posesión Pablo!, y poseer a tu hombre es una mezcla de grandes placeres, el placer de la mente mezclado con el placer de las caricias del pene en las entrañas.

-¿O sea que la mente las ayuda a tener esa clase de orgasmos?

-Sin duda, y cuando pasa lo que pasó anoche, que en medio de un orgasmo maravilloso se siente el pene endurecerse, suplicamos para que nos llenen en ese preciso momento… Es la gloria, es irse al cielo….Tal vez tú no lo notaste pero para mí fué un verdadero éxtasis…

-¿Tanto así?

-¡O más!… Mi útero se contraía junto con todos mis órganos y músculos…Su cuello se contraía hacia mi vagina en busca de tu semen, ¡Enloqueciéndome de placer!, y en ese preciso momento recibió de golpe tus descargas, se ha de haber abierto como boca sedienta para recibirlas en su interior y saciar así su sed de semen y yo mi sed de ti… ¡Qué maravilla Pablo!, que maravilla que fecunden nuestro cuerpo en medio de ese placer.

Ana miró a Pablo a los ojos, por unos instantes quedaron en silencio, silencio que ella rompió al decir.

-Anoche te tuve, te poseí, me diste todo el placer que eres capaz de dar, devoré tu pene con mi vagina, volcaste en mí todo tu placer hasta derramar dentro de mí ese maravilloso líquido que contiene todo lo que tú eres…Si no me cuidara, en estos momentos dentro de mi estaría tu vida unida a la mía para siempre, me hubieras dado tu vida para formar conmigo otra vida.

Ana hizo un silencio mientras miraba a Pablo llena de ternura, pero sintió en él temor al escucharla hablar, le puso su mano sobre la mejilla y agregó.

-Se que lo de anoche se trataba de sexo, de gozar, de placer…Estoy consciente de que fué asunto de pene, vagina y orgasmos…Pero eso no quiere decir que no te haya tenido y que aún estés dentro de mi…Anoche fuiste mío Pablo, muy mío….Y no creo que lo pueda olvidar mientras viva

Pablo miró a Ana desnuda a su lado, era imposible resistirse a una mujer como ella, y no solo por su belleza, deseoso le acarició los muslos pero decidió tratar de alejar la tentación de lanzarse sobre de ella para hacerle el amor de forma apasionada distrayendo la excitante charla.

Quitó su mano de los muslos de ella, tomó su reloj de encima del buró y vió la hora, eran casi las 9 de la mañana, "Que hora de meterse a la alberca, al fin niños" dijo en voz baja

-¿Qué dices?

-Los malditos niños que están en la alberca gritando…Me voy a bañar para bajar a desayunar, tengo hambre.

-¿Estás enojado conmigo por lo que dije?

-No Ana, ¿Cómo podría después de lo que me hiciste sentir anoche?

-¿Qué te hice sentir Pablo?

Pablo no respondió, se puso de pie y cuando pretendía ir al baño se detuvo al escuchar a Ana decir.

-Te voy a confesar algo y a pedirte un gran favor… ¿Serías capaz de hacerme un favor?

-El que quieras.

-Pablo, yo te quiero más de lo que debo, más que a un amigo y no es de ahora, cuando Jorge y yo comenzamos con nuestros problemas por alguna estúpida razón te buscaba, buscaba tu compañía, por eso iba tan seguido a visitar a Ximena…Para verte…. ___Pablo la interrumpió

-¡Espera!, si el favor es que te corresponda, no te lo puedo hacer…Eres muy linda, una mujer excelente en todos sentidos pero lo de anoche fué solo sexo…Un magnífico sexo…No puedo negar que te quiero mucho, pero….¡Demonios Ana, entiéndeme!

-Si, si te entiendo y ese no era el favor…Lo que te quiero pedir es que mientras dure esta locura me trates como si en verdad fuera tu mujer y no solo en la cama, sino en todo momento…¡Quiero sentirme mujer Pablo!___Gritó Ana llorando.

Pablo se sentó nuevamente a su lado, la abrazó y la acarició en la espalda y en los muslos, así permanecieron un rato, cuando ella se tranquilizó al bajar su mano por el dorso de Pablo, topó con el bulto que el pene erecto formaba bajo el calzón, se separó de Pablo, le miró el calzón, levantó la vista a los ojos de él quien solo levantó los hombros como indicando que su erección era lógica, Ana rió y le dió un beso en la boca, al separarse preguntó.

-¿Entonces?

-Dalo por hecho, serás mi compañera, mi pareja, mi mujer… Pero sin suponer que me puedo enamorar de ti.

-Eso lo sé desde hace más de un año… ¿Nos bañamos juntos?... Quiero regresar a este muchacho a su tamaño socialmente aceptable__Le dijo Ana en tono de broma.

Pablo dudó unos momentos pero ver a Ana desnuda a su lado no pudo resistir la tentación, la tomó de la mano levantándose los dos de la cama y continuando la broma dijo

-Vamos…No quiero ser criticado por la sociedad…Y solo es por eso, no pienses que estás muy buena y que me muero de deseos por ti.

-Jajaja… ¿Nooo?.... En fin, tendré que hacerte el favor de evitarte la vergüenza de salir a desayunar con esa erección…Y de paso te quitaré ese deseo que tienes por mi y que te está quemando por dentro.

Juntos entraron al baño, ya bajo la regadera se enjabonaron mutuamente y entre besos y caricias su deseo se magnificó, Ana de pie frente a él tomo el pene con su mano y lo comenzó a masturbar, diciendo "Me gusta, me gusta sentirlo así, firme pero suave, me gusta acariciarlo y darte placer" juntó su boca con la de él para disfrutar de un cálido beso, después ella se arrodilló frente a él, tomó el pene con sus manos y lo besó en el glande, levantó la vista hacia Pablo que no separaba la suya de su rostro, notó en su mirada no solo deseo, le gustaba, sin duda le gustaba como mujer y se sintió alagada y feliz, pero también sabía lo que Pablo estaba deseando en ese momento, así que le sonrió soltando una risa coqueta y lamió el pene Pablo cerró los ojos y cuando los abrió nuevamente, ella dijo riendo.

-¡Pídemelo Pablo!, dime algo cachondo, vulgar y pídemelo así lleno de deseo de que lo haga.

Pablo dudó unos instantes pero lo venció el deseo y le dijo

-Que buena estás Ana, que tetas más ricas tienes, me gustan tus piernas y tus nalgas, me gustan tus ojos, tu nariz…Quiero que me mames la verga con esa boquita tan linda que tienes y ver tu carita mientras lo haces.

-Pero voy a querer toda tu leche, voy a querer que llenes mi boca de leche, de mucha leche ¿Prometes llenarme toda la boca?....

-Te voy a dar toda la que tenga dentro de mí.

-Mmmm___Expresó Ana metiendo el pene dentro de su boca

Pablo exclamó "Ohhh, que delicia de boca tienes mujer, caliente, húmeda, me vas a ordeñar más pronto de lo que te imaginas". Ana metía el pene lo más profundo que podía, hasta csi tocar su garganta, lo chupaba, sorbía de el, lo apoyaba en la parte interna de sus mejillas acariciándolo con la lengua, el placer que le daba hizo que Pablo no resistiera, su pene se endureció y Ana apoyó el glande contra su paladar mientras con una mano apretaba el tronco del pene y con la otra le apretó suavemente los testículos. Cerró sus ojos dulcemente al comenzar a sentir las fuertes descargas de semen dentro de su boca.

Pablo se recargó contra la pared sus ojos se cerraban pero él se esforzaba por abrirlos y contemplar el bello rostro de Ana disfrutando de su semen llenar su boca. Cuando terminó su placentero y productivo orgasmo ella sacó el pene, levantó la cabeza y volteo a ver a Pablo con la boca abierta. Pablo observó la boca de Ana, detrás de sus dientes estaba lleno de semen y su lengua se cubría con el lechoso líquido, era un espectáculo excitante, Ana cerró la boca, le tomó una mano y la puso sobre su garganta y tragó.

-¡Qué linda eres Ana!

Exclamó Pablo emocionado al sentirla tragar su semen y agregó

-Una hembra maravillosa, una mujer excelente, me encantas, ¿Cómo puede haber mujeres como tú?

Ana sonrió pero no respondió, tomó el pene y lamió el semen que aún había sobre el glande para después ponerse de pie y juntar sus bocas en un delicioso beso. Ella tomó el jabón y le lavó el pene, cerró las llaves de la ducha y dijo.

-Nos lavamos la boca y podemos bajar a desayunar sin que pases vergüenzas.

Ana se puso un bikini y sobre de éste un short, no se puso playera, Pablo se puso su traje de baño y una camisa para bajar abrazados al restaurante de la alberca, ahí encontraron a Jorge tomando café, se acercaron a él quien miró a Ana con total indiferencia como si se tratara de la mujer de su amigo, Pablo preguntó

-¿Y Ximena?

-Durmiendo, en medio de su "resaca" me dijo que se daría un baño de agua fría y que bajaría…Ya pasó más de media hora…Pienso que se durmió otra vez.

-Se siente mal, no le exijan que venga al sol___Replicó Ana molesta.

Los tres se levantaron a servirse del buffet y desayunaron, terminando de hacerlo caminaron hacia los camastros a la orilla de la alberca, Ana se quitó el short para quedar en bikini y tirarse a tomar el sol, Pablo se recostó en el camastro de al lado mientras que Jorge caminó hacia la playa fumando un cigarrillo Ana lo miró haciendo un gesto de resignación y cerró los ojos.

Tiempo después Ana y Pablo se metieron a la alberca jugaron dentro del agua acariciándose mutuamente, salieron a tenderse en los camastros, Pablo le untó bronceador disfrutando la suavidad de su piel y Ana no podía ocultar su felicidad, cuando notaba que algún hombre la observaba estiraba su brazo hacia Pablo para tomarle la mano y ponerla sobre su muslo para que él la acariciara, como indicando que no estaba sola, que ya era el complemento de su hombre.

Jorge se acercó a ellos, se sentó en una silla junto a Pablo, no miró a Ana, simplemente permaneció pensativo mirando al horizonte marino. A eso de las tres de la tarde vieron acercarse a Ximena, su piel se había oscurecido por el sol y vestía su bikini blanco que tanto gustaba a Pablo quien le dijo

-Te ves bronceada, ¿Dónde estabas?

-Me quedé asoleando en el balcón de la habitación hasta que el sol cambió___Miró a Pablo y agregó__Me tiré al sol desnuda, bueno, solo con una pequeña panty…Me quedé dormida

-Luciste tu cuerpo amiga___le dijo Ana y Ximena respondió

-Solo con la muchacha que limpia las habitaciones, pero me pienso acostumbrar a lucirme en público, eso le gusta mucho a mi esposo.

Le estiró la mano a Ana para darle su argolla de matrimonio diciéndole

-Perdón amiga, pero quiero mi argolla, la que me dió el hombre que amo, la que me unió a él para toda la vida

Ana tomó la suya y le regresó a Ximena la de ella, Pablo notó que su mujer no resistía el deseo de llorar y la vió meterse de un clavado dentro de la alberca, inspiró profundo, se enderezó para quedar sentado en el camastro y bajó la cabeza. Ana le tomó la mano y se la apretó. Ximena nadó un rato en la alberca, salió del agua, se secó y se tiró en un camastro alejado de ellos pensativa, cuando el sol había secado su bikini, se levantó y caminó hacia ellos que bebían una copa, Jorge le preguntó

-¿Quieres algo de beber?

-No… Pienso que es momento de que platiquemos con nuestra pareja, ¿Vienes conmigo Pablo?

-Si claro

-Déjale la llave de tu habitación a Ana, por si la quieren usar, tú y yo vamos a mi habitación

-Ella la tiene.

-OK, en dos horas nos juntamos a comer… ¿Les parece?

-Jorge y Ana afirmaron y Ximena caminó en silencio junto a Pablo hacia el elevador.