miprimita.com

Encuentro la Sumisión de Evelyn

en Dominación

ENCUENTRO LA SUMISIÓN DE EVELYN

Te siento conmigo, desnudos ambos, podemos vernos y olernos. Siento a tu cuerpo rozarme, con toda tu piel. Mi cuerpo estirado, y voy alargando hacía ti mi mano y instantáneamente, percibes la intensa serenidad del deseo y de mi amor.

 

Tu finalmente te has decidido a venir y estas bajo un embrujo que te domina y me contemplas, no dejas que me relaje. Té noto como palpitas en tu vientre, porque te desvives por estimular tus sentidos; cual niña a la que le han complacido los mágicos reyes.

Ahora, tienes todas esas noches en que te abrazabas y te desvivías sin tenerme materialmente. ¡Ahora Evelyn han pasado, estás sintiéndome! Y comparas esos momentos, con nuestro encuentro de ahora tan real..., que han nuestros momentos anteriores han ido abonando.

Este encuentro, es algo que sientes como definitivo. Porque es el primer escalón de nuestra vida en común, de un encarar el futuro como pareja. Soy la mitad de ti misma y vives esa sensación "maravillosa", que tan largamente ha sido demorada.

El largo aplazamiento, hace que mi mera presencia realice la materialización, de uno de los millones de guiones, de los que imaginariamente has trazado en tu mente. Es una escena vivida, en mil ciudades y con nosotros, siempre nosotros, como estelares actores.

Me gustas y ya no he pensar en nosotros en silencio, te dices a ti misma. Siempre has estado pendiente de padres, marido o familia... en la dolorosa clandestinidad en que nos comunicábamos. Había una aproximación y un compromiso, mantenido durante meses en la lejanía.

Durante esos meses, era a través de la palabra que coincidían nuestros caminos, por lo que ahora preferimos una situación que dispare todos los sentidos y con nuestras bocas calladas. Tu, yo... y esa armonía y una rémora interior, que nos pone un sentimiento que apreció cual música y que se origina en nuestros corazones.

¡Si, juntos y en un lugar en que no hemos de ocultar lo que sentimos! Si tengo el legítimo orgullo de sentirnos, uno del otro y sumergirnos por entero ambos en la intersección de nuestras miradas. De atropellarnos, en los roces que nos dispensamos, alocadamente.

Me doy cuenta, que nos conformamos, en un una simbiosis y que estamos felices de estar con esta poca luz, la que entra por la ventana de nuestro cuarto, con la persiana subida y la cortina puesta. ¡Estamos dichosos así, porque hay algo de furtivo en este encuentro y en sentirnos unidos, par vivir siempre juntos!

Da igual la localidad, la calle y la plaza a la que dan las ventanas y el sitio donde tú has vivido. Tú y yo... y la música de nuestro amor y de unos gemidos que se nos desprenden, de los labios. Lugar y tiempo ahora son adornos de nuestra noche, siempre nos apetece la oscuridad y su abrigo.

Nos encontramos cómodos de noche, nos conocimos y enamoramos de noche. Y nos exploramos y sondeamos en esa oscuridad de aquel mes de julio. Y poco a poco, nos entregamos... partes de cada uno, al otro. Las mañanas y los días estaban plagados de incertidumbres y obstáculos; y es que reconozco que tu Evelyn los sorteabas muy arriesgadamente.

Siempre me quedaba alucinando, por tu soltura para encontrar situaciones y huecos, en que se hacía realidad un encuentro casual, un paréntesis en la jornada para que me enamorase más de ti. Aguardaba tu llamada de buenos días, algunos momentos en el desayuno y compartir nuestros sentimientos, que libremente fluían de nuestros labios, en el que y cono decirnos nuestros sentimientos.

El tiempo corría y, luego del desayuno solía transcurrir, como en senderos paralelos y autónomos y nuevamente resurgía la complicidad, para encontrarnos a la hora de comer y hablar... el rato que las circunstancias nos permitiesen. Pero, era un anhelo de que llegara el momento de las 14 horas. Y el mundo dejaba de rodar, pues en esos momentos... ¡Éramos ajenos a ellos, viviéndonos!

En breves momentos, se transmutaban todos nuestros "sentires" y se espoleaba una metamorfosis de la proximidad y de como yo escarbaba en todos los tonos de tu voz. Hoy sé que éramos ajenos al entorno; inmersos en la felicidad de esos minutos y esperando al momento de poder darnos mutuamente y por completo, sin disimulos.

Ya pasaron esos días y ahora ambos nos hemos desnudado, sin limitaciones de prisas, porque el deseo de disfrutar y explorarnos es enorme y solo existe esta sinceridad y comprensión. Notamos nuestros vientres revolverse, ante quien nos ama y que está enfrente nuestro, somos nosotros uno enfrente del otro.

Esa acción de desnudarnos, como encarándonos y conduciendo nuestras manos, del modo que más exprese nuestro sentir. Es la aventura, de desvelar la escultura de tu persona amada, verte viva, deseosa de mi persona y hacerte sentir que soy para ti, sin dudas y colmándote de amor, rebosando y subiendo y bajando un fuego interior que sólo he sentido contigo.

Ya no es un sueño de vida compartida, ni un recuerdo de los encuentros, tras la jornada de tarde o una voz que, tras estar juntos, se me hace un eco de sentimientos intensos. Ahora no me voy, porque estás a mi lado, me abrazas enteramente desnudo, y puedes olerme y abrazarme y frotarte con tu cuerpo y rozarme suave o apasionadamente con tu piel.

Me tienes para ti Evelyn, si fácilmente y tan sólo estirando un poco tu mano derecha. Si, cariño, esa es la "MANO QUE ME DISTE; que me la diste en una promesa de amor. Fue una promesa de ENTERA SUMISIÓN Y DE NO NEGARME NUNCA NADA, CON ELLA. Por eso ambos la llamamos mi mano. Y sabes que cada día te deseo, te deseo más, y más te me das.

Y dándote más, más tuyo me tienes y te alimentas de cómo te deseo una y mil veces, de tantas maneras y formas desconocidas antes por ti. Te acuerdas de cuando creías que eras fría y que no recibías ni un diezmo del amor que dabas y que no eras feliz. Ahora te humedeces y te sientes muy sensual, intensa, caliente y dulce. Pero sobretodo: ¡TE SIENTES QUERIDA, COMO NO ESPERASTE SERLO JAMÁS!

Recuerdas tus noches de sueños negros, de sentirte sola y desatendida, sin ser comprendida y sin poder compartir tus inquietudes. Notabas, una quemazón agónica de ser amada, un sentirte en un páramo helado, por lo árido e inhóspito de no recibir afectos y nos poder darte como necesitabas y recibir cariño y amor.

Que, es mejor, no pensar nada más. Sé que tendré sed porque siempre tengo sed después de verte, y tendré hambre porque hemos cenado rápido, pero ahora te deseo, te deseo por encima de todo.

Te acercas a mí, con un encendedor y paquete de cigarrillos entre los dedos, desnuda y en un estado de sobreexcitación, imaginando la escena que prometimos. Y que se inicia al presentarte la palma de mi propia mano. Ya sabes, cual es el acto siguiente...

Has dejado de fumar, te costó dejarlo, pero sobre todo té costo mantener la promesa, en momentos difíciles. Y recuerdas mi promesa, de que tu verdadera vida empezaría con un último cigarrillo, que apagarías en mi mano.

Me besas y hundes tus labios y la lengua en mi boca, porque me conoces y sabes darme todo lo que necesito.

Así comienzas el juego: tu enciendes el cigarrillo, sin tragar el humo y me lo muestras. Yo soplo, sobre el tabaco ardiente. E igualmente me siento yo, ardiente, deseoso...

Tu ya sabes, lo que mi mano necesita, la quemadura y tus cuidados después: "CREMA DESINFECTANTE Y CICATRIZADORA (SELVYDERM), unos guantes sanitarios y unos palillos aplicadores".

Y yo te entrego mi mano, sin tensarla, relajada y sonrío y te envío un beso cifrado de complicidad y amor, y aprieto y humedezco mis labios. Tu me observas y disfrutas de tu momento, de recogerme en mis deseos. Mascamos juntos, mi silencio y tu leve turbación.

Entras en mis pensamientos, me escudriñas, en el azul de mis ojos. Tu notas el deseo que té manifiesto, que hace que tú lo conviertas a todo ello, en un largo y seguido fluir íntimo gozoso.

Sientes las palpitaciones, en el placer que empiezas a brindarme en tus valles de pasiones: tu zona púbica, tu canalillo anal, y el regazo que forman tus bellos senos. Todos tus sentidos están activos y sumamente alborotados.

Separas ligeramente los labios de tu boca, tomas mi mano y con ella recibes todo mi cuerpo. Separas tus piernas, te exhibes abierta, cual flor de seducción. Remueves tus nalgas y té noto destellos de ansiedad y placer.

Ves, como avivo el fragor de la colilla y la acercas, lentamente a esa mano que te siente, tan intensamente a ti en la tuya y que tanto me amas. Me ves acusar el contacto del tembloroso cilindro humeante y lo vas a retirar, pero te retengo un momento.

Sudamos ambos, y cuando tu brazo insiste en retirarlo, me miras pidiendo perdón. Me pides que te deje curarme... y te indico, que antes que nada, soples sobre la pequeña quemadura y lamas el resto de la mano.

Noto, como contraes las piernas y, se yerguen más y más tus pechos. Los mueves nerviosa, y jadeamos un poco ambos. Sabes que me siento excitado y estoy muy deseoso de sentirte y de tomarte y, tu propiamente igual.

Te has tomado tu tiempo lamiendo la mano, y hasta la has besado y mordido un poco. Ello te ha excitado, superando el grado previo de libido, anterior a la consumación de nuestro acuerdo. He notado como frotas tus rodillas, pies y muslos; tampoco quieres disimular.

Me curas, cuidadosa y maternalmente. Pasamos un rato de inmovilidad, de contemplación, desde nuestras respectivas posiciones. Te miro, sientes mi mirada y sientes deseo de tactos y de sentir como te habla tu cuerpo trabajado en las sesiones de lunes, miércoles y viernes (en el cursillo des gimnasio municipal).

Tu cuerpo te pide ser tensado, sentirte doblarte y pronunciarte en todas las posiciones y quieres ser moldeada en posturas que te despierten y que borden nuestros deseos.

¡ANHELAS MÁS Y MÁS... ESO...!

TE LO ANTICIPAS, Y ESO TE ACELERA LA RESPIRACIÓN, Y TU LATIR.

Tienes una sensación de culpa y una brutal excitación que te atenazan. Evelyn reconoces que eres incapaz de satisfacerte, por ti misma. Y miras, el paquetito que hay en la mesilla, sabes que es...

Es el collar de cuero para tu cuello, lleno de pinchos (vueltos hacia fuera) y con una hebilla grande; y las dos pulseras. Me indicas, con tu mirada si puedes tomarlas y ante mi afirmación las tomas, y tras abrirlas mudamente, esperas a que te las coloque. Te estás entregando, libremente y notas como las rozo, y como abro el collar.

TE LEVANTAS EL CABELLO Y SIENTES COMO LO AJUSTO A TU CUELLO; MUY LENTAMENTE ¡EL COLLAR DE TU SUMISIÓN!.

Y sientes, el abrazo de ese cuero, en tu piel; lo llevarás casi siempre estando a solas (excepto en la ducha y cuando estés castigada).

Y luego, tras tenerlo colocado, nos quedamos quietos, mirándonos y asumiendo nuestro acuerdo... Y tu prometes serme obediente, previsora de nuestras necesidades (en todos los sentidos), lo haces con gran esperanzada y felizmente entregada. Yo te prometo, ocuparme siempre de ti, más allá de lo que hayas llegado a imaginas, jamás niña.

Por eso, me ofreces tus muñecas y té ajusto sendas muñequeras, con hebillas y con pasador de seguridad (sujeto por una pequeña cadenita). Te ves, te sientes bien dándote y siendo tomada. Notas mis besos en tus muñecas y en tu cuello.

También, notas mi mano rozándote las rodillas y la parte baja de los muslos. Y te calientas, por cada sensación impresa, por una parte de mi persona; es que te digo, que de todas esas formas te amo, te deseo y que quiero hacerte feliz siempre mi amor.

Deseas que te coma, que tome tu cuerpo y te muerda y que hunda fuertemente mi cara entre tus piernas, sin pedirte permiso, ni avisarte y beba y coma de ti ahí. Me pides ,que use el cigarrillo en ti, o que halle otro modo de castigarte, por lo que me has hecho.

Miras el cigarrillo y al momento sientes que te digo que lo tomes y lo pases por encima de tu "conchita". Espero que vayas planeando y palpando el bello de tu pubis, acercándote y alejándote de tu cuchita. Es como si fueran las antenas o palpos de una hormiga ciega, porque sin mirar, eres mucho más atrevida y te llevas al límite. Y si tú eres feliz, contigo lo soy yo también.

Luego, digo que lo acerques más y que vaya tu misma mano palpándote, con el incandescente morro de cigarrillo, buscas en el canal de tu placer, tan cerca como puedas, pero sin llegar a tocarte en él.

Lo haces y me miras. Te digo que sigas, así pero sin mirarme , por lo que con tus ojos miras a lo lejos..., enfocando nuestras sombras, sobre el blanco de la pared. Yo me acerco a ti, y te voy lamiendo lentamente, todos los rincones de tu cuerpo con mi lengua, acariciándote con mis dedos y prohibiendo que me mires.

Te sientes, como mendigando y recibiendo el cariño que nunca has tenido. Te descuidas, y te quemas ligeramente, por sucumbir a un momento de descontrol, en tus fantasías. No te parece tan doloroso, y lo haces una vez más.

Realmente, es más el efecto mental, que lo que con tus acciones haces. Pero estas muy lubricada y apenas te has quemado. Mas bien, lo que ocurre, es que tienes un desafuero, de sentirme comerte.

Y te digo que, ahora tu cuerpo, me súplica de ser mío para siempre, que no paras de desearme una y otra vez; desde hace meses. Hace meses que duermes y despiertas soñando ser mía, ser toda para mí.

--Lo sé Evelyn, y acepto tu sumisión...

Cuando te excitas mucho, sientes que yo llego a tu vientre, ya en ese estado y con tus caricias intimas, sientes que no eres capaz de pensar en nada, mas que en sentirme tomarte y que ahora quieres que... te deje acariciarme y amarme.

Sé, lo que deseas sentirme, entrar por delante y por detrás abajo, la intuyes y la imaginas dentro de ti y teniéndote abrazada y en esos momentos; siempre necesitas rozarte la base del capuchón de tu clítoris, haciéndote círculos. Por eso, froto así, y te coloco, en ese momento, tres pinzas de plástico con forma de pez, y con entrantes dentados.

Ya te comenté, como eran el día que las compre, y sabias que las tenía dispuestas. Te digo que te dispongas, que cierres los ojos, para no ver. Mientras te digo que sigas acariciando la base de tus pechos, tus costados y tu vientre; es decir, nada de lo que te sacie totalmente, y quiero que sientas un placer moderado, pero prohibiéndote llegar a gozar rápidamente.

Yo, noto como muerdes tus labios, ladeas la cabeza y entonces te beso tu cuello... Así un rato, hasta que me decido a obrar y te coloco las pinzas bien lentamente. Sí, voy dejando que transcurra, un espacio tiempo, entre una y otra.

Entre la inserción de una pinza y el siguiente pinzado, voy prolongándolo un poco mas las caricias, los besos se acercan a tus labios, van a tus ojos y cara, incluso lamo tus lagrimas, que me saben deliciosas.

Estás, dispuestas y encendida, a mi gusto. Las dos primeras, te les coloco primero en cada uno de tus pezones, y una tercera y última en uno labios mayores, bien de abajo.

¿Pero, como te las coloco? Pues, abriéndolas y cerrando varias veces, en un cierre de mordida incompleta. Es como más efecto te harán, luego te tomo tu mano izquierda y hago que las abras y cierres otras pocas veces, son nuevas mordidas de placer y dolor.

Eso, te estimula a abrir y separar tus piernas, te doy cachetitos en tu vientre con la mano hueca y acusas cada golpe con ligeros espasmos, que repercuten en tus pezones y en el labio anillado. Pero también, en la calentura de tu vagina que palpita y segrega un flujo que sale en golpes y que brota sin cesar.

Libero las pinzas de arriba, después de tres tentativas frustradas (abrir y soltarlos) y noto el rigor de la erección de tus pezones recientemente liberados del pinzamiento. Quieres sentir que hago algo, una sensación distinta de pertenencia y compañerismo, con mucho amor.

Tu sabes que: "esa mano tiene el resorte de hacerte sentir un placer enorme", como tu misma me has confesado, tantas veces. Tu sabes, ya que me perteneces, mi pericia, será la encargada de ponerte las pinzas.

Te digo que, en un futuro te anillaré, también ambos pezones sin anestesia, pues esa es una muestra de tu completa sumisión. Y te dejaré, otras marcas en tu cuerpo, para que recuerdes que eres mía y como gozas conmigo. También, a veces dejaré que me muerdas y dejes marcas de tu boca y uñas en mi cuerpo, para que sepas y sepan todos, y especialmente todas que soy solo para ti Evelyn. Eso, nos dará mucho placer, a ambos.

Estás deseosa de mi polla, quieres que te entre en algún momento. Tus pezones, se rozan entre mis dedos, es la puerta del placer compartido. Quiero que mi tallo penetre reiteradamente y notes que te crece en tu boca.

Y puedas sentirla palpitar, caliente y creciendo en tu boquita de seda ensalivada. Y, asida a mí me harás sentirme muy feliz de ser tu amo, amante y esposo... Entraré y sentirás que, estirando tu mano, puedes acariciarme mi bolsa escrotal y que luego quieres que entre y te tome.

Se por ti que necesitas y quieres que te haga sentirme estirado, encima de ti y saltando con sed de darte felicidad y un cielo de estrellas de amor compartido. Y tus manos, se me clavarán en mis nalgas, para hacerme llegar a descargar el placer en tu interior...

Y sentirme tuyo, intensa y únicamente tuyo, vertiéndote todo el placer contenido y recibiendo el tuyo...

Mas de Kharlo1

Oda de la Sumisión completa a su amo

Te domo pero te hago, sentir

Amiga sumisa destapa con calma tu cara

Los catorce mandados de tu amo y señor

Que tengo ansia de ti, mujer

El cante de nuestro encuentro

Acompáñame y por las noches siento el celo de tene

Lo que hay es amor y correspondencia de dos ena...

Ven a mí

Siempre tengo ganas de estar contigo

Permanecer pleno de toda tu amada amante

En la soledad de mi cuarto

Acompáñame y me entregare

Eres profunda y misteriosa

Nos encontramos, es una nueva cita de amor.

Preciosa Sevillana

Vivo por ti

Amada sumisa

Quiero descubrir todo tus secretos

Quisiera jugar contigo todo el día.

Estoy llenándome de ti y sintiendo tu proximidad

Toda mi vida te intuí y te esperé y un bendito día

Que dulce tenerte en mis brazos y que bello es.

No queremos sino regalos de amores

¿Como estas y como te vendrás a vivir conmigo...?

Toda nuestra vida son signos de amor

Dudo de cómo ir a ti y hacerte venir

Quiero repetir mi amor en ti

Amor vienes y te despiertas

Amor de por vida eres tu

Finitos, hacia el infinito amor

Compañera querida y amada

Quiero sentirte, piel con piel

Las tetas son alimento y diversión

Confianza

Me gustan las comidas de Chichi

Para ser felices ambos.

Momentos que estamos juntos.

Mi amiga y mi maestra en el amor

Cuando estoy contigo y siempre estás en mí.

Pienso en ti

Sumisión es cosa de dos

Que bombón que sos

Donde estarás en este preciso momento

Se que soy un ser esperando, esperándote y deseánd

En la oscuridad

Quiero…. Quiero… Quiero

Que bello es un buen culito

¿Que tienes que me das?

Tú no oprimas mis manos

Espérame en el portal de casa

Dudas y quieres venir

Tus ojos ya tristes ya alegres

Me desespero mientras te espero

Ad tempos futurae

Estar juntos muy juntos, aquí y; ahí ahiii

La cama “contigo” es el lienzo del amor

Ser tuyo y entregarme

Y en eso entras, con hambre de mí… y yo fieramente

Eres un deseo constante y realidad siempre

Ladrón soy de tus besos, mercader de tus palabras

Somos una pareja a tres

en jaulas separadas, deseo volar

Tu persona me impresiona

Y yo recorro tu piel

Otra vez más...

Sumisa amada, paloma acurrucada

Te sientes esclava y perrita, de tu amo

Dos jóvenes, amigas y estudiantes de Barcelona 2

Tu Señor Kharlo

Dos jóvenes, amigas y estudiantes de Barcelona 1

Impresiones contigo sumisa amada

Canelita quiero ser sobre tu cuerpo de nata (2)

Te siento exultante y enternecida de amor

Tu rostro me mira y me siento tuyo

Amada sumisa y felina

Canelita quiero ser sobre tu cuerpo de nata (1)

Desnudas mi persona

Tormenta Amada...

Desayunan y acaban con las bragas pringadas

Isabel es tu nombre y eres mi tentación

Una joven loba monta a amigas y prima

Lencería 3 - Con un aire Chic muy sexy, tu aire

Lencería 1 – Con un aire cotidiano, tu aire

Lencería 2 – Con un aire deportivo, tu aire

Cabalgas -con quien amas-

Ensalivo y castigo el cuerpo de una embarazada

La infantilización de una jovencita “bien pija”

La otra mujer que querrías ser

Bocados de amor, me muero y te muero*

Ingrid: se hace la esclava de otra mujer

La jovencita y la lactante

Una jovencita sumisa, que lentamente se entrega

Estación Amor

Trío les - Dos amigas seducen a una mirona, en la

Mi novia y su prima embarazada, mis sumisas

Te hago ir con faldas cortas y tops escotados (4)

Una chica embarazada, desatendida por su marido

Te hago ir con faldas cortas y tops escotados (3)

Dos estudiantes, lesbianas

Te hago ir con faldas cortas y tops escotados (2)

Te hago ir con faldas cortas y tops escotados (1)

Estoy haciéndome, una gran puta

Acudo, ante lo que mi amo ordene

El despertar de una sumisa y de su señor.

Heridas punzantes, en el corazón y en el alma

Sumisamente estás

La poción de Lord Kharlo

Jessy, la bebe que perrea conmigo

Soy su ama y su necesidad desde ese día

Azotes buscados, son azotes queridos

Carta a una sumisa

Despierta o dormida, eres mi esclava querida.

Con tu culito izado en pompa

Azotes para mi aprendiz de sumisa (4)

Azotes para mi aprendiz de sumisa (3)

Azotes para mi aprendiz de sumisa (2)

Azotes para mi aprendiz de sumisa (1)

Me gusta que te desesperes y me esperes

Eres mi cocktail de amor

Mi sumisa, va conociéndose (3)

Dos cuerpos enamorados

Mi sumisa, va conociéndose (2)

Anticipándome contigo, en el nuevo encuentro

Mi sumisa, va conociéndose (1)

Eres un animal sexual

Me comes con tu boca y te pones encima

La gran mamada, me la haces arrodillada ante mí

Te siento mi amante “pony girl”

La gran lianta de Lidia

Cuidador de una mujer casada

Eras una loba en celo y un cuerpo que me pertenece

La sumisa sabes su lugar, unos pasos tras su amo

Mi esclava me siente, como una flor que se abre a

Estudiante de sumisión guapa, atada y simpática

Desvístete en cuerpo y alma para mí y entrégate...

Sumisa desvístete y espérame (4)

Es una chica guapa, simpática, buena estudiante 3

Sumisa desvístete y espérame (3)

Es una chica guapa, simpática, buena estudiante 2

Sumisa desvístete y espérame (2)

Sumisa desvístete y espérame (1)

Es una chica guapa, simpática, buena estudiante 1

La familia de esclavas: madre e hijas, esclavas 4

Hembras de familia bien y bien putas

La familia de esclavas: madre e hijas, esclavas 3

La familia de esclavas: madre e hijas, esclavas 2

La familia de esclavas: madre e hijas, esclavas 1

Las pijitas: la madre y las dos hermanas... 4

Me gusta que me veas desnuda y en ropa interior

Las pijitas: la madre y las dos hermanas... 5

La monja, y dos chicas lesbianas, del internado 3

Las pijitas: la madre y las dos hermanas... 3

La monja, y dos chicas lesbianas, del internado 2

La monja, y dos chicas lesbianas, del internado

Las pijitas: la madre y las dos hermanas... 2

Las pijitas: la madre y las dos hermanas... 1

Domando a Ruth, otra vez

Hermanas amantes, amigas y calientes consentidas

Manchas de dos mujeres

El cafecito no me gusta solo (2)

Siento que mi “mango fálico…”

El cafecito no me gusta solo (3)

Reflexiones sexuales (1)

Amantes, somos amorosos amantes

A veces

Lo deseas más y más, y me deseas más a mi.

Canalladas del destino

Transformé en ti mi deseo

Unión de tres… (2: Tania, Adela y yo)

Dos troncos con vida

Unión de tres… (1: Tania, Adela y yo)

Quiero comentaros unas cosas

Me gustas. ¿Y yo a ti…?

¡Que mi puñal te marque una y otra vez! (4)

El es rico, no lo arruinarás

¡Que mi puñal te marque una y otra vez! (5)

Se necesita interina

Mi segunda ocupación (2)

Soy esclava transexual, de una mujer (4)

Mi segunda ocupación (1)

Soy esclava transexual, de una mujer (3)

Soy esclava transexual, de una mujer (2)

Soy esclava transexual, de una mujer (1)

Mi cuñada es mi amiga

Me gusta iniciar

Me gusta que me esperes

Mi rocío masculino, baja por tu cuello

Consientes ser atada y estar a mi merced (1)

A mis pies te pones y de ello gozas

En un lugar del Sur, gracias a internet

Atada a las esquinas de la cama

El poder de esos ojos, y el pañuelo

Anaís, una lesbiana que se admira a si misma

La Rionegrina, que me cuida

El mando de la ducha y el cepillo eléctrico.

La pulsera de compromiso

Totalmente mia, de tu amo

El pasajero, del tren de cercanías.

En la Telaraña de nuestras vidas

Dos pájaros somos

Sintiendo y orando ante Ti, mi Señor

Te espero, esperanzadamente

Mi alma se eleva y se junta con la tuya

Nos veo tan juntos y unidos como dos diamantes

Y yo soy contigo en el mismo aire

Tú eres esa persona

Azul y verde, el amor nos muerde

¡por estar ahí, yo junto a ti y tu junto a mi!

Las cosas no son lo mismo

Una sesión de amor, hasta nuestra pasión saciar

Tiemblo a tu lado, tiemblo dentro de ti

La tentación, por ti, me nubla la razón

Maria: ¡la confesión, de una esclava! (2)

Maria: ¡la confesión, de una esclava! (5)

Maria: ¡la confesión, de una esclava! (4)

Maria: ¡la confesión, de una esclava! (3)

Maria: ¡la confesión, de una esclava! (1)

El sentimiento nos crece, el amor nos mece

Te Respiro, el aliento

No soy mía, soy parte de ti

Ligo con esposa embarazada, de mi amigo

Los azotes

Yo, en un columpio quisiera ponerte.

Quisiera sostenerte, junto a mí, en este mes...

A veces te siento, como que de mí estás tan lejos

El hallazgo de “ACRHUS”

Tumbada en tu habitación, de madrugada.

Dudas y por eso das los pasos tan despacio.

Crisanta, mi vecina embarazada

La espera tiene su recompensa de amor.

Me siento entregada

La línea dos, del metro: con dos seres amándose

La -bizarra- gamberra...

El autobús de retorno

La mulata preciosa, Virginia Suzzane

Los dos vestidos: tu piel y tus sentidos.

El día de nuestra boda, tus manos se aprietan 2

Educando a Eva, una -aprendiz de sumisa-

A solas me esperas

Acabamos sobre el suelo, sudorosos y felices

Intento imbuirme de ti y verte

Las dos hermanas santeras y mi arisca jefa (6)

Día a día, amada mia... - Dia a día te ama mi alma

El día de nuestra boda, tus manos se aprietan 1

No había tenido la dicha de sentir alguien como tú

Las dos hermanas santeras y mi arisca jefa (5)

Es una loba, con piel de cordera

Fue una relación centelleante

Alargando mis manos hacia aquella chica

Me atrae mi hija, y yo a ella...

Amor y amistad

En un país, nuestro país

Eres como te siento

Conmovidos ante el mundo entero

Sonrisa preciosa

Tus labios íntimos

Alma mía entre la distancia

Mi anillo de platita contigo, que eres mi...

Es mi amor para ti

Ahora tu recuerdo te trae a mí

Llorando a veces nos descubrimos que la tristeza

El valor real es estar desafiándome...

Pienso lo que será, que modifiques tu ropa para mí

En la pena muda del silencio

Las dos hermanas santeras y mi arisca jefa (2)

Las dos hermanas santeras y mi arisca jefa (3)

Cuando estés un poquito mal

Bésame y me puedes desnudar, es algo muy nuestro

Las dos hermanas santeras y mi arisca jefa (4)

Las dos hermanas santeras y mi arisca jefa (1)

Cada mañana tienes una palabra de amor

Desayuno de Amor

El Alma me arde, cual zarza dolida y transgresora

Peluquera a domicilio, masajista ocasional.

Decidió entregarse a mí, en el partido de fútbol

Bajo por la calle, pensando en dos barquitos...

Mis fetiches son la ropa femenina y los olores

La adolescente mirona

Virtualmente te conocí y me enamoré de ti

Habitación de Amor, es la mujer embarazada

Almudena y Berta: jovencitas amantes

El encuentro deseado

Quizas, el paso es aceptar la completa sumisión

Tus palabras y tus gemidos, están en mi óidos.

Chica mala, mete tu mano dentro del tanga,, tócat

Quizas, el primer paso es venir a verme

Amalia se entrega a mi hija y dice que me desea

Musa amada, tu a mi vida iluminas

Eres esclava, de tu amor

Pasear contigo

El descubrimiento: Me gustan las Adolescentes

Alber mi esencia, en tí

Es un martirio desearte y no tenerte

El niño de cuatro dedos, el tullido y el monje

Seduzco y someto a Amalia, la amiga de mi hija

Deseo Poseerte Entera

Tu eres mi sonrisa

Tus ojos brillan cuando me hablas

Carta a un concebido, acomodado dentro de su mamá:

El Don del Bangré

Así estamos, asiéndonos de mil maneras.

Hola sonrisa

Tu siempre... de mí, tendrás mucho más .

Mi cara se gira a tí, dentro de tí me descubro

Me gusta cuando callas, y desde tu silencio te das

Notas que caminas delante de mí

Dormido en tus brazos, te quiero

Unos momentos, ante los rayos de luna

Corazón que vuelas libre

Sentimientos que se me salen

Cuando estamos solos, todo se transforma

De mí para tí, este canto ha nacido

El tiempo no existe

Jardincito mi dulce jardincito

En la sombra de la noche

Los dos

Nuevas maravillas encontradas

El azar, pone a dos seres: Uno frente al Otro

Vistes selectamente y buscas un algo más.

Me entrego a ti emocionado

A tu vera, vive la primavera de mi amor...

Somos seres asintientes que caminamos -mirándonos-

De continuo permaneces en mi ser

Estoy enamorado de ti...

El corazón se esfuerza imparable

Mi amada de ojos verdes

Estoy profundamente enamorado de ti, mi Sevillana

Compartir contigo el Amor

La adolescente mirona se masturaba ante mí, y yo..

Me rasuro, para ir como una puta y golfa

Confesiones Utha: mi sobrina rubia con coletas

A mi amiga dependienta: pija, puta y tímida.

El entendimiento S/M

Te amo, Amada mía (2)

Te amo, Amada mía (3)

Te amo, Amada mía

Rasurada y tomada analmente

Soy el INSTRUMENTO de placer

Sumisa, encuentra amo y amor

La sumisa, mi mujer, ya no está sola

La sumisión de Mar

Querida Sumisa amiga, aspirante a Esclava (1)

Alia, la joven madre, es mi amante (2)

Me apoyé en mi amante, junto a su marido y cuñada

Mi amante, es una mujer casada...

Seduzco, Masturbo y follo a la amiga de mi amante

Alia, la joven madre, es mi amante (1)

Mi sobrina Reyes, mí desayuno lindo (2)

Mi sobrina Reyes, mí desayuno lindo (1)

Mi sobrina Nina... (3), se desnuda y nos pajeamos

Mi sobrina Nina... (2), me enciende muchísimo

Mi sobrina Nina... (1), está sola en casa.

Una sobrina, encendida como una puta, se me pajea

Te sorprendí de nuevo Rhut (5)

Lidy, gira sobre la mesa...

Lidy, la hija de mi vecina...

Te sorprendí de nuevo Rhut (4)

La hermana de mi cuñado, es una ladrona

Mi sobrina, se me entrega

Hermana y sobrinas amantes (2)

Hermana y sobrinas amantes (1)

Cristy mi amante hermana, lactante

Nury (02: El juego es tomarte tu cola intimamente)

Nury (01: El juego es seguir el juego...)

Vane y Jeny (3: Vane, estás celosa de Julia)

Te descubrí subida a una escalera, nina....

Vane y Jeny (2: La seducción completa de Vane)

Vane y Jeny, se hacen novias (01)

Te sorprendí de nuevo Rhut (3)

Te sorprendí de nuevo Rhut (2)

Te sorprendí de nuevo Rhut (1)

La primera carta

Fran y Lidy, madre e hija, deseando la noche

Silvia y las manos de Kharlo

Rosy y Alicia: dos hermanas viciosillas (3)

El pais de las maravillas y; la flor de terciopelo

Rosy y Alicia: dos hermanas viciosillas (2)

Rosy y Alicia: dos hermanas viciosillas (1)

Recuerdos de Kharlo (06: usa la vara de azotes)

Mi tutora favorita, del St. Nicolas College

Amor furtivo, en el internado, St. Nicolas

La niña pija, dominada y cogida por un desconocido

La niña pija, se deja masturbar en una tratoria

Paula y Andrea, van a la playa

El Estudio (3) Contrato de sumision 24-7

El cafecito no me gusta solo (1)

Chat lesbico

El Estudio (2)

El Estudio (1)

Kharlo y Rhut, en la carretera comarcal, (2)

Kharlo y Rhut, en la carretera comarcal, (1)

Recuerdos de Kharlo (5)

Recuerdos de Kharlo (4)

Recuerdos de Kharlo (3)

Recuerdos de Kharlo (2)

Recuerdos de Kharlo (1)