Albergas mi esencia, en tí
Me amasas y esparces por ti misma,
por toda tu piel me sientes y me respondes con tus caricias balsámicas.
Me transportas, con tu perfume, a un mar de olores.
Me prendo en las zarcillas de tus mimos,
y me recreo entre tus amorosos ardores.
Variamos las posturas, de nuestras comunes sacudidas orgásmicas.
Mi corazón se me crece, junto a tí engrandecido,
mientras me lames con embeleso,
me siento obra, de tus diarios desvelos de amor.
Gimiendo, miro como me embrujan tus verdes ojos,
siento que mi placer coges, por todas tus grietas,
y notas que, mi ser se te entra, por todos tus huecos.
En el árbol de nuestro amor, crecen diarimente nuevos brotes,
Tomas un trocito de mí, el cual haces crecer..., entre tus manos;
Y me siento de este modo sujeto, por tus labios.
Te distancias un tanto, hasta que sabiéndome a mí,
así de tí yo me siento bien febrilmente preso.
Tu amada, con va y vienes de tu mano, me agitas,
hasta que se me brota mi esencia;
y de ella tu tomas, para gozar de mi íntimo alimento.
Ahí ya entregada, descorres las cortinas de tu felidad,
me haces fundirme a tí, me amalgamas a ti ser, entre fantasía y realidad.
Tras el lance de amor, te contemplo gozosa y satisfecha, estirada a mi lado.
Junto a tí respiro y hablamos de nuestros lazos,
me siento vivo entre tus brazos,
descubro un nuevo peldaño de la escalera de placer.
Cariño, se que albergas mi esencia,
porque sientes que algo de mi ya te prende, en tu vientre;
me das las gracias, por darte un nuevo germen de vida.
Porque, ambos sabemos que tu llevas,
gestando tras hacer realidad una ansiedad de meses,
hoy te han confirmado que ya gestas a un hijo largamente deseado.
Kharlo.