A VECES.
A veces: conviene mantener una cierta reserva, respecto a la propia intimidad. También es adecuado elegir las personas con quien te sinceras y que saben de todas tus intimidades.
Porque, no todas las personas se hacen merecedoras de saberlo todo de ti, de lo que te gusta y lo que te molesta; pero especialmente de lo que te apasiona en el terreno sexual y de tus preferencias.
Una chica sincera, una mujer que habla con el corazón se encuentra con variados personajes, los cuales fanfarronean y solo van con el cotilleo. Estos, no se molestan en comprender y entender, y en tener una cierta discreción sobre la reputación de una muchacha.
Con lo cual, a veces, hacen que corra la voz de que esta chica o la otra es "en singular" o son "en plural" unas putas. Porque esa hipocresía, si luego están que beben los vientos por tener sus favores. Pero eso si, no se hace merecedores de tener una continuación en saber de las explicaciones de sus intimidades.
La chica que se entrega y quiere experimentar con un compañero o compañera de juegos, agradece la discreción y si encuentra entendimiento y receptividad se puede dar mucho más. Pero, lo que no quiere es que sus compañeros de estudios o de trabajo, o los amigos del grupo con el que sale estén con la comidilla de las cosas que hace.
En la intimidad puede aceptar trato obsceno en el hablar y en el actuar-, pero eso no es una "licencia de corso" (de piratería), para que a costa ella se rían y despotriquen y metan sus narices, en lo que solo es cosa de ella y de quien se comparte con ella.
Alguna chica, sincera y honesta, ha tenido que cambiar de barrio y/o de instituto o trabajo, por eso: porque los enterados y enteradas de turno se quieren reír a su costa; a base de querer manipular su vida y por pensar que quien lo hace con alguien esta abierta a hacerlo con todos y/o todas (lo cual es falso y no tiene ni un mínimo de base).
Alguna de vosotras o vosotros, sabéis lo duro que es ser la comidilla de la clase, del instituto y del barrio. Alguna o alguno, no ha tenido que cambiar de clase, porque se sabe con nombres y apellidos de sus "cuitas" o "aventuras amorosas" (muchas veces tendenciosamente exageradas y malinterpretadas, con toda la mala idea del mundo).
Alguna chica, conoce con el tiempo que ha tenido suerte y compañero o compañera sentimental, es una persona honesta y sincera, y además un cómplice de juego y de amores que pone fantasía e iniciativas. Con ello, el terreno es abonado, para tener la felicidad y el amor.
Pero, en otros "numerosos casos", se ve decepcionada y se siente utilizada. A veces por eso busca en compañeros o compañeras de edades superiores, un entendimiento que no encuentra con gente de su edad.
No es de extrañar, especialmente en jovencitas y jovencitos ardientes que busquen compañeros mayores e incluso maduros. Y a veces con ellos tienen incluso libertad, para ir con otras personas y alternar y se queman un poco con el fuego de un amor loco: acabando por refugiarse, y por entregase a esa persona madura en cuerpo y mente.
Puede parecer que es como encontrar un oasis, dentro de un desierto de sensibilidad. Eso, es posible encontrarlo con la primera persona o pareja, pero normalmente tarda más.
Una chica abierta, que le cuenta algo a alguien o lo escribe, y luego se siente acosada y mareada, insultada y estoqueada por enterados y enteradas de la vida; tiene que amargarse un poco. Y al final, opta por trasladarse a otro lugar, y redirigir sus amistades, alejándose de esos comentarios.
Y suele llegar al comentario de que básicamente: "casi todos o todos los tíos somos unos cerdos irrespetuosos y presuntuosos". Dolidas y sentidas, tardan en volver a confiarse. Pero acaban superándolo, cuando conocen a alguien que realmente merece la pena.
Una chica defraudada, durante un tiempo ha de ser más reservada y cuidadosa, y más selectiva. Más, el carácter acaba manifestándose, y tras un tiempo resurgirá su carácter alegre y su expresividad, comenzando a entablar nuevas amistades (especialmente si es simpática y atractiva).
Pero, seleccionará un poco más, aprenderá e independientemente de su edad (niña, adolescente, joven, adulta o anciana) acabará haciendo lo que le de la gana y con elija para estar.
El carácter abierto es algo que es un don, más la simpatía no es un derecho a ser usada por "todo sujeto", para cogerla y usarla y dejarla ahí tirada. Una mujer, como también un hombre, se quiere sentir querida y valorada por ella misma "en su totalidad".
Ir con ropa moderna, cortita y enseñando la barriguita (bajo el top o la camisetita de tirantillos) y enseñando la parte superior de la braguita y tanga, es normal. No equivale a decir, estoy esperando que me metáis manos. Es solo una moda y como tal algo acostumbrado.
Y especialmente en verano, se suele ir con ropa más ligera. Esto es algo natural y cualquiera con un poquito de mente lo podría entender, si tu no es un o una "gilipollas o gilichochos (acuño este término, como aportación personal)". Ella sentirá miradas de tíos (mayoritariamente, somos mirones) y algunas tías, que mirarán sus pechos, su culo, su ombligo y entre sus piernas.
Esto lo puede soportar, e incluso puede alegrarle un tanto el día, siempre que haya modos y no aparezcan las groserías y el tomarse unos derechos no otorgados a meterle mano y a hablarle groseramente de buenas a primeras.
La delicadeza, el oír las indicaciones de una chica/mujer y tener suavidad y ternura, especialmente en las primeras relaciones y en los primeros momentos de la amorosa unión deberían ser normas conocidas y asumidas como universales. Más suele haber más egoísmo que otra cosa y aparece el dolor y la falta de tacto. Cuando no, se busca la propia satisfacción y se olvida la de "ella" como si solo interesase abrir la botella y quitarse la sed.
La botella, es una chica-mujer-doncella y quiere sentirse querida y entendida. Hay que dedicarle el tiempo y escucharla. Hay que darle lugar a que se sienta querida y entendida y valora. Se tiene que sentir amada. Si consigues eso, ella te dará mucho más que un fugaz momento de placer (el de eyacular). Una mujer, del amor y del sexo espera más.
A veces, hay que fomentar que una chica se exprese, aunque le cueste y el que realmente consiga decir lo que quiere y encajarlo en la relación y en el momento de la sexual y amorosa unión puede ser cosa de semanas e incluso meses (a veces casi un año). Si puede tardar, hay que tener paciencia más merece la pena (esta es mi opinión, mi convicción y lo que afirmo convencido).
La primera persona, que la cuela hasta lo más hondo, no es forzosamente la más importante. Y generalmente, en ese día, no llega la mejor corrida de la vida, para la chica. Para el tío tampoco, aunque presuma de haber tenido su virguito. Meter dentro de un coño el pito, no es el colmo de la pasión. Es más, después de meterlo hay que acariciarla, entenderla y agradecerle ese momento, que no suele ser muy divertido.
Si el desvirgue, puede venir precedido de excitación; más esta con el dolor y el daño, suele acompañarse de lágrimas y algunos gritos (generalmente no son de placer, os lo aseguro). Y tras eso PARECERIA CORRECTO AGRADECERLE SU ENTREGA y USAR LAS MEJORES MANERAS, HABLAR CON ELLA (antes y después, porque en el momento, de la penetración hay que estar atento a las palabras de ella y a sus indicaciones).
Si ella se siente querida, si recibe un trato grato y cariñoso, ese momento lo tendrá como algo positivo y un momento decisivo, para la vida amorosa. Sino solo será un recuerdo desagradable, y una mala nota para quien la desvirgó. Es curioso el recuerdo de algunas chicas de su "desvirgamiento": olores a colonias, sudor, pelos en su cara y apretones, algo que rompe y sentirse tirada.
En fin estar siendo utilizada, sin cuidados y sin cariño (todo un desaliño). No es eso, de vaya favor que me hizo este o ese, finalmente ya soy mujer (ya lo era y lo es, antes y después).
A veces, en esa "PRIMERA VEZ" está presente el olor a tabaco o los porros, el alcohol y hasta ciertas drogas (como pastillas y otras ). Pero todo eso, incluso puede teñirse de más oscuro, con cierta violencia o por hacer que la mujer sea forzada al "coito", es decir a follar, por varias personas o por algunos golpes, empujones y por meterla en alguna encerrona (de sus "amigos" o "amigas", o al menos eso dicen que son).
Porque EL RECUERDO PUEDE SER SOLO el peso del cuerpo "de él", sus olores y sus torpes movimientos y tocamientos; lo cual se corona con la forzada y precipitada introducción del pene, que toca hasta el fondo de su vagina. Por suerte la mayoría de las veces, es con el uso de "gomas o condones", y cuando no la chica, es más previsora y se ha tomado la pastilla (o se la toma el día después, del retraso o de sus dudas acudiendo a un centro de planificación-.
Es duro para una chica, el no llegar a sentir "ni tan solo el agradecimiento" o "unas palabras dulces", unas caricias tiernas y las miradas de cariño a sus ojos, algunos besitos y el estar abrazada, un rato largo hasta que ella se reanime, o se sienta querida y valorada más allá de cómo un pedazo de carne (o un calamar).
La complicidad en los días u horas suele darse, pero y en las horas y días después. Porque la mayoría, de "desvirgadores" no piensan en eso, en lo delicado de la vivencia interior y en lo positivo que es hacerla sentir acompañada y valorada como "persona" (con sexo femenino eso sí). Tío, acuérdate de que ella es una persona, sélo también tú (eso me digo yo, en cualquier relación y haya o no desvirgamiento).
La primera vez es algo natural, que debe llegar y normalmente a una chica eso le pasa sobre la edad de entre los 13 y los 17 años. A los chicos, se nos suele retrasar el tema unos dos añitos más. Hay muchas excepciones, pero más o menos, por ahí va todo. Y ver el cuerpo de una chica con naturalidad, a esas edades no abunda. Se dan casos si, pero se está muy excitado.
Y los tocamientos son algo que a veces se acaba antes de llegar a la penetración. Eso también explica, que no justifica la prisa de algunos por entrar dentro del coñito de ella. Y no miran en hacerla gozar, cuando menos antes de la penetración. Porque tras la penetración puede haber cariños, pero gozos y placer, para las chicas no suele haber mucho que digamos.
Una chica, tras algunos desengaños, suele apreciar el querer ser abrazada y besada. Y aprecia que le den tiempo a hacer lo mismo, que pueda expresar sus mimos a su forma y a sus maneras, sin ser corregida e interrumpida en "sus iniciativas".
El juego de las miradas, de las caricias y de las palabras cruzadas y con alternativas es algo que es muy fructífero y agradecido. Es un "diamante sentimental" que una chica aprecia enseguida y la hace volverse más atrevida y hasta un poco gamberrita y provocadora.
El entendimiento, entre las dos partes de la pareja y cierta simpatía y alegría son excelentes. La complicidad suele surgir, y la ropa ajustada y el tiempo libre (verano, vacaciones, puentes o fines de semana largos) son milagrosos en los efectos provocadores, para tener una SENSUAL SEXUALIDAD POSITIVA.
Creo que el mérito, se resume en actuar como niños, teniendo cuerpos de adultos. Y una vez excitados, hacerse cosas por todos lados, sin ideas preconcebidas, tal como surge el deseo y la necesidad del momento. Ahí, no importa si empieza ella o el, si gusta el color de piel o la suavidad del tono de voz. Todo vale, con respeto y consentimiento, se propicia cualquier buen momento.
LA PALABRA FUNDAMENTAL ES CON CONSENTIMIENTO Y SIN PRISAS, SIN IDEAS PRECONCEBIDAS.
ES IMPORTATE QUERER HACERLE QUERER PASAR UN BUEN RATO A LA PERSONA AMADA O DESEADA, CUANDO MENOS QUE DISFRUTE TANTO COMO TÚ.
CIERTA ORIGINALIDAD, EL ESTILO (maneras propias) O EL SALIRSE DE LAS NORMAS PREFIJADAS DE LOS TÓPICOS ESTA AUN MEJOR QUE MEJOR. ESO SI, SIN QUERER INVENTAR EL TRIPLE SALTO MORTAL, DE ESPALDA.
EL NO SENTIRSE NINGUNO O NINGUNA DE LAS PARTES ESTRESADAS, NI FORZADAS A NADA ES MUY IMPORTANTE. YA SURIGIRA EL MODO, EL LUGAR Y LA OPORTUNIDAD.