miprimita.com

Hasta que la muerte os separe.

en Otros Textos

HASTA QUE LA MUERTE OS SEPARE...

Hasta que la muerte...

...Y Dios se enfadó grandemente con las criaturas que había creado, y les expulsó del Jardín del Edén por comer el fruto prohibido del árbol del bien y del mal que proporcionaba conocimiento, y devinieron mortales, y fueron conscientes de su sexualidad, y sintieron vergüenza por su desnudez y se taparon con hojas de parra, y la serpiente fue condenada a reptar sobre su vientre, y Adán a ganarse el pan con el sudor de su frente, y Eva a parir con dolor.

¿Pero por qué fueron castigados con la mortalidad animales y plantas, en principio inocentes? ¿O es que las plantas también comieron el futo del árbol del árbol prohibido? No lo creo.

La muerte no siempre existió. Se calcula que ésta evolucionó hará solamente unos 1000 millones de años, cuando 2 primitivos organismos —bautizados por la tradición hebrea como "adán" y "eva"— practicaron por primera vez el sexo de fusión, esto es, cuando recombinaron genes procedentes de fuentes diferentes para producir un nuevo individuo.

Hasta entonces, la muerte era ajena a los primeros cuerpos (microbios y bacterias) que, en origen, eran inmortales, como refleja acertadamente el relato bíblico.

La reproducción uniparental sin sexo fue la única modalidad durante los primeros 2000 millones de años de la vida en la Tierra. Una molécula de ADN creaba otra molécula idéntica a ella por división celular, pudiendo multiplicarse ilimitadamente sin que por allí apareciera ningún cadáver. Teniendo energía, agua, alimento y espacio suficiente, todas las bacterias y otros organismos son, literalmente, inmortales.

Pero "adán" y "eva" inauguraron una modalidad muy conocida por los humanos, pues somos su resultado: practicaron sexo, dando lugar a individuos similares pero no idénticos. Técnicamente, el sexo es la mezcla o unión de genes (moléculas de ADN) procedentes de más de una fuente. Aunque "sexo" no tiene porqué ser genital, ni equivaler necesariamente a reproducción: cualquier organismo puede recibir nuevos genes —entregarse al sexo— sin reproducirse.

Nosotros asociamos sexo con reproducción porque quedaron ligados durante la evolución de nuestros ancestros animales.

Efectivamente, el envejecimiento y la muerte eran desconocidos en el "Jardín del Edén", es decir, antes de la aparición del sexo. La vejez y la muerte natural, tal como las conocemos los mamíferos, evolucionaron en protoctistas arcaicos (unos descendientes de las bacterias).

Estas diminutas células individuales tuvieron que fundir sexualmente sus núcleos para sobrevivir. Como consecuencia, partes de las células, duplicadas por la fusión, se hicieron redundantes e innecesarias. La muerte se hizo inevitable, y la conexión sexo/muerte también.

Por ello no es casual que religión y cultura asocien el sexo con la muerte. Freud atribuyó toda actividad psicológica al impulso sexual (eros) y al impulso de la muerte (tánatos), pues en nosotros la vida tiene que ver tanto con la creación sexual de una identidad nueva, única y singular como con su destrucción: los organismos que se reproducen sexualmente existen como individuos discretos (en significado físico) durante un tiempo limitado.

El sexo es una manifestación de la tendencia natural a mezclar las cosas, de la vocación de la materia a derivar hacia otros estados y de una "idea" del tiempo: El Big Bang, el estallido primordial que dio lugar a todo, aún no ha acabado. En el "Jardín del Edén", pues, estaban presentes todos los desarrollos posibles, tanto si luego tuvieron lugar como si no. Por eso sorprende la reacción de las Iglesias contra Darwin.

Hace muy poquito reconocía ¡por fin! un célebre y racional astrofísico, que si se admite la teoría del Big Bang hay que admitir que todo, todo, está compuesto de la misma materia primordial —"energía que no se crea ni se destruye, se transforma"—, que "somos descendientes de las estrellas" y hasta que podemos volver a creer en la astrología.

El morir, pues, se revela como algo accidental. La muerte, por el contrario, como algo sustancial. Justamente lo contrario que nos ha hecho creer la religión judía: de ahí el pesimista juramento matrimonial:

"Hasta que la muerte nos separe".

No guardo rencor porque nunca me he casado y ya soy viejo para emociones demasiado conocidas, pero sí pido al Vaticano, si no es molestar, dos cositas relacionadas con este asunto:

a) que digan la verdad, es decir: "Hasta que la muerte nos vuelva a unir";

b) satisfacción a una curiosidad personal: ¿cómo se desplazaba la serpiente antes del castigo?

Mas de Jotaene

La niña de mis ojos

Así somos los gallegos

El fondo del alma

Edad media y leyes medievales

¡Oh, las mujeres!

Hetairas. cortesanas y rameras (1)

La loba

Lo potencial y lo real

Una vida apasionante (3)

Una vida apasionante (5)

Una vida apasionante (4)

Arthur Shawcross

Bela kiss

Romasanta, el hombre lobro

Poemas de Jotaene

Anuncio por palabras

Una vida apasionante (2)

Una vida apasionante

La semana tráquea

Relatos breves y verídicos (1)

El parricida sonámbulo

Curvas Peligrosas

Un fallo lo tiene cualquiera

Mujer prevenida vale por dos

La prostituta y su enamorado

Tiberio Julio César, el crápula

Caracalla, el fratricida incestuoso

Despacito, cariño, muy despacito (8)

Cómodo, el incómodo

El matriarcado y el incesto (4)

El matriarcado y el incesto (1)

Incestos históricos (4)

El matriarcado y el incesto (3)

El matriarcado y el incesto (2A)

Viene de antiguo

Viene de antiguo 2

El gentleman

Margarito y la virgen de Rosario

La multivirgen

Un grave encoñamiento (7 - Final)

Un grave encoñamiento (6A)

Un grave encoñamiento (6)

Despacito, cariño, muy despacito (7)

Despacito, cariño, muy despacito (6)

Despacito, cariño, muy despacito (5)

Incesto por fatalidad (8)

Academia de bellas artes

Un grave encoñamiento (5A)

Orgasmos garantizados

Un grave encoñamiento (5)

Un grave encoñamiento (4)

El sexo a través de la historia (2)

El sexo a través de la historia (3)

Despacito, cariño, muy despacito (4)

Despacito, cariño, muy despacito (3)

Un grave encoñamiento (3C)

Un grave encoñamiento (3B)

Un grave encoñamiento (3A)

Un grave encoñamiento (1)

La leyenda negra hispanoamericana (3)

Un grave encoñamiento (2)

Despacito, cariño, muy despacito (1)

Incestos históricos (3)

La leyenda negra hispanoamericana (2)

Incestos históricos (2)

La leyenda negra hispanoamericana (1)

Incesto por fatalidad (5)

Incesto por fatalidad (6)

Incestos históricos (1)

El dandy

Incesto por fatalidad (2)

Incesto por fatalidad (3)

Incesto por fatalidad (1)

Incesto por fatalidad (4)

Como acelerar el orgasmo femenino

Hundimiento del acorazado españa

Un viaje inútil

La máquina de follar

Sola

Follaje entre la nieve

Placer de dioses (2)

Placer de dioses (1)

Navegar en Galeón, Galero o Nao

Impresiones de un hombre de buena fe (6)

El Naugragio de Braer

La Batalla del Bosque de Hürtgen

El naufragio del Torre Canyon (1)

El naufragio del Torre Canyon (2)

El naufragio del Torre Canyon (3)

La batalla de Renade

Impresiones de un hombre de buena fe (7)

Impresiones de un hombre de buena fe (4)

Impresiones de un hombre de buena fe (7-A)

Olfato de perro (4)

Hundimiento del Baleares

Olfato de perro (5)

No sirvió de nada, Mei

Cuando hierve la sangre (2)

Cuando hierve la sangre (1)

Paloduro

Impresiones de un hombre de buena fe (2)

Impresiones de un hombre de buena fe (1)

Olfato de perro (2)

Impresiones de un hombre de buena fe (3)

Olfato de perro (3)

Olfato de perro (1)

La hazaña del Comandante Prien

Una tragedia Marítima olvidada (5 Fin)

Una tragedia Marítima olvidada (4)

Una tragedia Marítima olvidada (3)

Una tragedia Marítima olvidada (2)

Una tragedia Marítima olvidada (1)

La Hazaña el Capitán Adolf Ahrens

Derecho de Pernada (4)

Derecho de Pernada (2)

Derecho de Pernada (3)

Derecho de Pernada (5)

Derecho de Pernada (1)

La maja medio desnuda

Oye ¿De dónde venimos?

Mal genio

Misterios sin resolver (2)

Misterios sin resolver (3)

Crónica de la ciudad sin ley (10)

Crónica de la ciudad sin ley (9)

El asesino del tren

Tanto monta, monta tanto

Crónica de la ciudad sin ley (8)

El timo (2 - 1)

Testosterona, Chandalismo y...

El canibalismo en familia

¿Son todos los penes iguales?

Código de amor del siglo XII

Ana

El canibal japones.

El canibal alemán

El canibal de Milwoke

El anticristo Charles Manson

Crónica de la ciudad sin ley (6)

Crónica de la ciudad sin ley (7)

El 2º en el ranking mundial

El timo (2)

El vuelo 515 (3)

El bandido generoso

El carnicero de Hannover

El Arriopero anaspérmico

El vuelo 515 (2)

El vuelo 515 (1)

El carnicero de Plainfield

El petiso orejudo

La sociedad de los horrores

Don Juan Tenorio con Internet

Andrei chikatilo

El buey suelto

Gumersindo el Marinero

La confianza a la hora del sexo

El timo (1)

Los sicarios de satán

The night stalker

Barba azul

¿Serás sólo mía?

¿Quién pierde aceite?

El barco fantasma

El sexólogo (4)

Encuesta sobre el orgasmo femenino

Captalesia

El mundo del delito (8)

El sotano

The murderer

Virtudes Teologales

El sexólogo (3)

El mundo del delito (7)

El signo del zorro

La sexóloga (4)

La sexóloga (5)

Memorias de un orate (13)

Memorias de un orate (14 - Fin)

El orgasmómetro (9)

El orgasmómetro (10)

El sexólogo (1)

El sexólogo (2)

La sexóloga (2)

La sexóloga (3)

Memorias de un orate (12)

El mundo del delito (4)

El mundo del delito (5)

La sexóloga (1)

Memorias de un orate (9)

Memorias de un orate (11)

Memorias de un orate (10)

Memorias de un orate (9 - 1)

Qué... cariño ¿que tal he estado?

¿Que te chupe qué?

Memorias de un orate (7 - 1)

Memorias de un orate (7)

Memorias de un orate (6)

Memorias de un orate (8)

Memorias de un orate (5)

Memorias de un orate (4)

Enigmas históricos

Memorias de un orate (3)

Ensayo bibliográfico sobre el Gran Corso

El orgasmómetro (8)

El viejo bergantin

El mundo del delito (1)

El mundo del delito (3)

Tres Sainetes y el drama final (4 - fin)

El mundo del delito (2)

Amor eterno

Misterios sin resolver (1)

Falacias políticas

El vaquero

Memorias de un orate (2)

Marisa (11-2)

Tres Sainetes y el drama final (3)

Tres Sainetes y el drama final (2)

Marisa (12 - Epílogo)

Tres Sainetes y el drama final (1)

Marisa (11-1)

Leyendas, mitos y quimeras

El orgasmómetro (7)

Marisa (11)

El cipote de Archidona

Crónica de la ciudad sin ley (5-2)

Crónica de la ciudad sin ley (5-1)

La extraña familia (8 - Final)

Crónica de la ciudad sin ley (4)

La extraña familia (7)

Crónica de la ciudad sin ley (5)

Marisa (9)

Diálogo del coño y el carajo

Esposas y amantes de Napoleón I

Marisa (10-1)

Crónica de la ciudad sin ley (3)

El orgasmómetro (6)

El orgasmómetro (5)

Marisa (8)

Marisa (7)

Marisa (6)

Crónica de la ciudad sin ley

Marisa (5)

Marisa (4)

Marisa (3)

Marisa (1)

La extraña familia (6)

La extraña familia (5)

La novicia

El demonio, el mundo y la carne

La papisa folladora

Corridas místicas

Sharon

Una chica espabilada

¡Ya tenemos piso!

El pájaro de fuego (2)

El orgasmómetro (4)

El invento del siglo (2)

La inmaculada

Lina

El pájaro de fuego

El orgasmómetro (2)

El orgasmómetro (3)

El placerómetro

La madame de Paris (5)

La madame de Paris (4)

La madame de Paris (3)

La madame de Paris (2)

La bella aristócrata

La madame de Paris (1)

El naufrago

Sonetos del placer

La extraña familia (4)

La extraña familia (3)

La extraña familia (2)

La extraña familia (1)

Neurosis (2)

El invento del siglo

El anciano y la niña

Doña Elisa

Tres recuerdos

Memorias de un orate

Mal camino

Crímenes sin castigo

El atentado (LHG 1)

Los nuevos gudaris

El ingenuo amoral (4)

El ingenuo amoral (3)

El ingenuo amoral (2)

El ingenuo amoral

La virgen de la inocencia (2)

La virgen de la inocencia (1)

Un buen amigo

La cariátide (10)

Servando Callosa

Carla (3)

Carla (2)

Carla (1)

Meigas y brujas

La Pasajera

La Cariátide (0: Epílogo)

La cariátide (9)

La cariátide (8)

La cariátide (7)

La cariátide (6)

La cariátide (5)

La cariátide (4)

La cariátide (3)

La cariátide (2)

La cariátide (1)

La timidez

Adivinen la Verdad

El Superdotado (09)

El Superdotado (08)

El Superdotado (07)

El Superdotado (06)

El Superdotado (05)

El Superdotado (04)

Neurosis

Relato inmoral

El Superdotado (03 - II)

El Superdotado (03)

El Superdotado (02)

El Superdotado (01)