DIÁLOGO ENTRE LESBOS Y PRÍAPO
La bella Lesbos descansaba bajo el frescor de un higuera. Sus pechos duros como el mármol subían y bajaban al compás de su respiración todavía sobresaltada. Junto a ella, las Tres Gracias roncaban exhaustas tras el polvo compartido con la Madre de Todas las Lesbianas.
Acertó a pasar por allí el chulo Príapo, como siempre marcando paquete, que echando un vistazo a los cuatro cuerpos femeninos sonrió por lo bajini y se dirigió a Lesbos en estos términos :
Príapo :Bella Lesbos. Observo que me has quitado clientela.
Lesbos :Hermoso Príapo. Ya sabes que no obligo a nadie.
Príapo :Ya, ya ; pero te aprovechas de los calores veraniegos de estas gorditas para manejar sus conchas a tu placer.
Lesbos :Bueno. Concha, concha, lo que se dice concha, solamente tiene tu prima Venus.
Príapo :A mí me lo dirás, que le acabo de dar un repaso con este pedazo de verga y creo que no le he llegado a lo más hondo.
Lesbos :Estarás perdiendo facultades.
Príapo :Ni lo sueñes. Pregúntaselo a Apolo, que lo tengo coladito por mis huesos, bueno, por mi rabo. Si hasta el Padre Júpiter me pone ojitos. Estoy como un tren.
Lesbos :La que está para comérsela soy yo, pedazo maricón. Que tengo a todas las diosas revueltas para compartir la cama conmigo. Ya sabes que soy una experta.
Príapo :No me digas maricón, pedazo de bollera, que ya sabes que me van tanto los animales de pelo como los de pluma. Y a ninguno dejo insatisfecho. Y por lo que dices de las diosas ya lo sé. La diosa Flora te está preparando un ramo para agradecerte el orgasmo de anoche : no sé como te las apañas con las tías que siempre las haces que se corran aunque las haya empalado yo un rato antes.
Lesbos :Manitas que tiene una. Por cierto, estoy preocupada por nuestra madre Hera pues se ha encoñado con Marte y no lo deja ni a sol ni a sombra.
Príapo :Ya se sabe que, a ciertas edades, las mujeres perdéis un poco la vergüenza.
Lesbos :Sí, sí. Pero lo malo es que Diana, que bebe los vientos por Marte , está que trina y no está dejando títere con cabeza, en el bosque, con su arco y flechas .Ahora que digo lo de flechas. El otro día te ví haciéndolo con el diosecito Amor. Pedazo de pedófilo eres. Te aprovechaste que el niño llevaba la venda sobre los ojos.
Príapo :Y una mierda. Era él quién me persiguió durante días. Hasta que me pilló desprevenido tomando la siesta junto al río. Como ya sabes que siempre voy empalmado, al despertarme me lo encontré ensartado en mi espetón y subía y bajaba por él como en una cucaña ayudado de sus alitas. Menudo bujarroncillo está hecho.
Lesbos :Si. Y tú te aprovechaste porque yo lo ví saltar por los aires cuando tu surtidor se puso en marcha.
Príapo :Bueno, dejemos las generaciones futuras que se vayan entrenando y hablemos del presente. Creo que Neptuno tiene a otra Sirena en su harén.
Lesbos :Si , algo he oido. Dicen que se llama Ariel y que está como un queso. Cuando tenga ganas de saborear pescado me la tengo que ligar.
Príapo : Qué zorra eres . Desde luego que desde que te soltaste el pelo y saliste del armario de los bollos no te sacias con nada.
Lesbos : Pues no pienso cambiar, mientras el cuerpo aguante. Y de momento está por aguantar : mira que tetas, que cintura, que vientre, que chochito
Príapo : Vale, vale. Que me voy a olvidar de quién eres y te voy a dar un repaso.
Lesbos :Ni lo intentes, picha gorda. A mí sólo me van los "bocatti di cardinali". O sea, las almejas, los higos, las almendras, los mejillones, los conejos, las patatas, los coños, los chochos, las vulvas, las figas, las conchas etc.,etc.,etc. Pero los nabos no están incluidos dentro de mi dieta : me repiten y me dan ardor.
Príapo :Pues tú te lo pierdes, tortillera, porque no hay nada mejor gastronómicamente hablando que mezclar sabores y texturas. Yo no le hago ascos a un buen rabo habiéndome zampado primero una ración de almejas. En las últimas fiestas Floralias me marqué un trio con Venus y su prima griega Afrodita, que son una par de cachondas. Luego se nos unió Hércules al que le añadimos un trabajo extra para que nos enculase a ellas dos y a mí. Y nos quedó un polvete de cine. Aún tengo la próstata algo irritada de la metida que me endilgó. Pero yo se la devolví con creces y todavía está tomando baños de asiento en las Termas de Caracalla. Sin embargo , las dos primas tragaron con todo y aún pedían más. Esa Venus es un pozo sin fondo. Bueno : dos pozos, porque la empalamos los dos a la vez ( que mis cojones chocaban con los de Hércules ) uno por cada agujero. Y mientras ella, para matar el tiempo, le trabajaba la concha a su prima Afrodita, que cómo se corría en griego no entendimos nada de lo que dijo .
Lesbos : Ya me has puesto cachonda. Por cierto, me tengo que marchar a una cita con Baco para arreglar lo de los vinos de la fiesta de esta noche. Y de paso me va a presentar unas jovencitas Bacantes que tienen mucha marcha ( por lo menos eso me ha dicho ). Voy a ver si tengo suertecilla y me pego un revolcón con alguna o con todas , que no soy elitista para estar bien fresca y corrida en la fiesta de esta noche. Que si nó voy desesperada desde primera hora y no disfruto igual que si estoy relajada.
Príapo : Pues yo voy a acercarme a casa de Narciso que me envió recado. No creo que quiera catarme el rabo, pues ya sabes que él es muy pajillero. Muy suyo. Me pongo nervioso siempre que voy a su casa y me topo con tantos espejos. No he visto persona más satisfecha de su propia belleza.
Lesbos : Cada cual llevamos nuestra cruz. La tuya la llevas colgando entre las piernas.
Príapo : Tienes razón. Hasta luego.
Lesbos : Hasta luego, semental.